Adentrándose en un terreno que hasta no hace mucho tiempo era exclusivo de la ciencia-ficción, unos científicos han confeccionado un mapa del cerebro que relaciona puntos muy pequeños con vocablos concretos, de tal modo que podría ayudar a decodificar pensamientos verbales no exteriorizados por las personas.
Unos científicos de la Universidad de California, en Berkeley (EE.UU.), han dado un paso en esa dirección al construir un "atlas semántico" que muestra en colores vivos y múltiples dimensiones cómo organiza el lenguaje el cerebro humano. El atlas identifica las áreas cerebrales que responden a palabras que tienen significados parecidos.
Lo hallado está basado en un estudio de visualización del cerebro, en el transcurso del cual se registró la actividad neural mientras los voluntarios que participaron en él escuchaban historias de un programa de radio. Las observaciones mostraron que al menos una tercera parte de la corteza cerebral, incluyendo las áreas dedicadas a la cognición de alto nivel, está implicada en el procesamiento del lenguaje.
En particular, en el estudio se encontró que personas diferentes comparten mapas de lenguaje similares.
La similitud entre la topografía semántica de unos sujetos y la de otros es realmente sorprendente, tal como subraya el autor principal del estudio, Alex Huth.
La creación futura de mapas detallados que muestren cómo organiza el cerebro palabras distintas a través de sus significados podrían acabar dando voz a aquellos que no pueden hablar, como las personas que han sufrido un derrame cerebral, otros daños en el cerebro o enfermedades neurológicas motoras, como la esclerosis lateral amiotrófica (ELA). Si bien la tecnología de lectura de mentes sigue estando muy lejana en el horizonte, tecnológico, cartografiar la organización del lenguaje en el cerebro acerca un poco más a la realidad la decodificación de los pensamientos que consisten en diálogos interiores.
Lo hallado está basado en un estudio de visualización del cerebro, en el transcurso del cual se registró la actividad neural mientras los voluntarios que participaron en él escuchaban historias de un programa de radio. Las observaciones mostraron que al menos una tercera parte de la corteza cerebral, incluyendo las áreas dedicadas a la cognición de alto nivel, está implicada en el procesamiento del lenguaje.
En particular, en el estudio se encontró que personas diferentes comparten mapas de lenguaje similares.
La similitud entre la topografía semántica de unos sujetos y la de otros es realmente sorprendente, tal como subraya el autor principal del estudio, Alex Huth.
La creación futura de mapas detallados que muestren cómo organiza el cerebro palabras distintas a través de sus significados podrían acabar dando voz a aquellos que no pueden hablar, como las personas que han sufrido un derrame cerebral, otros daños en el cerebro o enfermedades neurológicas motoras, como la esclerosis lateral amiotrófica (ELA). Si bien la tecnología de lectura de mentes sigue estando muy lejana en el horizonte, tecnológico, cartografiar la organización del lenguaje en el cerebro acerca un poco más a la realidad la decodificación de los pensamientos que consisten en diálogos interiores.
Fuente NCYT