Los humanos sudamos para refrigerarnos. Los cerdos, por ejemplo, son incapaces de hacerlo, por ello deben rebozarse en el barro para hacerlo (lo cual también invalida el dicho "sudar como un cerdo"). El siguiente nivel es un robot que también puede sudar para refrigerarse.
Es lo que han conseguido investigadores de la la Universidad de Tokio. El robot ha sido bautizado como Kengoro.
El sudor que usa el robot para su refrigeración en realidad es agua desionizada que sale por los huesos porosos de aluminio que conforman su estructura. Al llegar a la superficie, el líquido también se evapora como sucede con el sudor humano.
El líquido debe recargarse manualmente en el robot: basta con un vaso para que pueda estar activo durante 12 horas. Gracias a este sistema, pues, el robot puede hacer ejercicio como nosotros sin recalentarse, como realizar flexiones durante 11 minutos seguidos.
Fuente XATAKA CIENCIA