La nave de New Horizons de la NASA ha despertado de su hibernación con el objetivo de prepararse para un sobrevuelo histórico en los confines de nuestro sistema solar.
La sonda, que visitó Plutón en julio de 2015, ha estado en modo hibernación desde el 21 de diciembre para preservar sus recursos. El pasado 5 de junio, empero, el centro de operaciones en el Laboratorio de Física Aplicada Johns Hopkins recibió la confirmación, a través de la Red de Espacio Profundo de la NASA, que la nave había salido de su letargo, tal como había sido programado. New Horizons ahora comenzará a prepararse para su resolución de fin de año: Ultima Thule, un objeto en el cinturón de Kuiper que explorará el 1 de enero de 2019, en lo que será el encuentro más lejano con un cuerpo celeste de un artefacto hecho por el hombre. Actualmente, la sonda se encuentra a 6.000 millones de kilómetros de la Tierra.
«Nuestro equipo está concentrado de lleno en los planes para el sobrevuelo de Ultima Thule y muy emocionado sobre el hecho de que New Horizons esté de vuelta activa y lista para las operaciones», dijo el investigador principal de la misión Alan Stern. En los próximos días serán enviados los primeros comandos a las computadoras a bordo de la sonda. El próximo paso será actualizar la memoria, obtener datos científicos sobre el cinturón de Kuiper y completar una serie de chequeos técnicos. Todo esto llevará aproximadamente dos meses, y las observaciones previas al encuentro con Ultima Thule se iniciarán a finales de agosto.
Fuente MYSTERY PLANET