Muchas personas han padecido este malestar en algún momento, ya sea por levantar un objeto pesado, una mala postura o algún golpe. Aunque estos dolores suelen ser momentáneos, hay casos en los que las molestias pueden volverse crónicas, alterando el bienestar diario. Sin embargo, investigadores del Boston Medical Center encontraron una respuesta positiva al tratamiento de este dolor con ejercicio y estiramientos.
El 90% de los dolores de espalda son imposibles de rastrear. Una misma lesión muscular tiene diferentes sensaciones en cada persona, por lo que es difícil saber de dónde viene específicamente el daño y cómo puede ser intervenido quirúrgicamente. Aunque los medicamentos pueden ser un aliado, algunos crean adicción o irritación estomacal.
A lo largo de los años, médicos han recetado reposo, pastillas y cirugía, pero cada vez más investigadores han considerado el ejercicio como una solución.
El equipo del Boston Medical Center realizó un estudio en donde 320 pacientes con dolor lumbar crónico fueron asignados a yoga, terapia física y una serie de clases educativas sobre su condición. Tres meses después, los enfermos eran significativamente menos propensos a tomar medicamentos, además de que reportaron una disminución de dolor y mayor movilidad.
No existe una cura definitiva al dolor de espalda crónico, pero está comprobado que el ejercicio de bajo impacto y la terapia física mejoran la postura, la movilidad y reducen el dolor.
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