Unos científicos han conseguido por vez primera inducir con éxito la conversión de células de piel humanas en células madre pluripotentes mediante la activación de los propios genes celulares.
Este prometedor avance es obra del equipo de Timo Otonkoski y Jere Weltner, de la Universidad de Helsinki en Finlandia, y Juha Kere, del Instituto Karolinska en Suecia.
Nuestros cuerpos constan de muchas clases diferentes de células, cada una con su propia función. Shinya Yamanaka, pionero japonés en la conversión de tipos de células, hizo el descubrimiento, que le valió ganar un Premio Nobel en 2012, de que las células de piel adulta pueden convertirse en las típicas de los embriones en su fase más temprana, las llamadas células madre pluripotentes inducidas. Este proceso se llama reprogramación.
Hasta ahora, la reprogramación solo ha sido posible introduciendo artificialmente los genes esenciales para la conversión, los llamados factores Yamanaka, en las células cutáneas donde normalmente no se hallan activos.
El equipo de Otonkoski, Weltner y Kere, ha inducido una metamorfosis exitosa en células de piel que ha dado lugar a células madre pluripotentes. La transformación se ha logrado mediante la activación de los propios genes de las células. Dicha activación ha sido posible gracias a usar tecnología de edición genética (concretamente la técnica llamada CRISPRa), a la que se puede orientar para que active ciertos genes. El método permite así activar la expresión genética sin mutar el genoma.
Este prometedor avance es obra del equipo de Timo Otonkoski y Jere Weltner, de la Universidad de Helsinki en Finlandia, y Juha Kere, del Instituto Karolinska en Suecia.
Nuestros cuerpos constan de muchas clases diferentes de células, cada una con su propia función. Shinya Yamanaka, pionero japonés en la conversión de tipos de células, hizo el descubrimiento, que le valió ganar un Premio Nobel en 2012, de que las células de piel adulta pueden convertirse en las típicas de los embriones en su fase más temprana, las llamadas células madre pluripotentes inducidas. Este proceso se llama reprogramación.
Hasta ahora, la reprogramación solo ha sido posible introduciendo artificialmente los genes esenciales para la conversión, los llamados factores Yamanaka, en las células cutáneas donde normalmente no se hallan activos.
El equipo de Otonkoski, Weltner y Kere, ha inducido una metamorfosis exitosa en células de piel que ha dado lugar a células madre pluripotentes. La transformación se ha logrado mediante la activación de los propios genes de las células. Dicha activación ha sido posible gracias a usar tecnología de edición genética (concretamente la técnica llamada CRISPRa), a la que se puede orientar para que active ciertos genes. El método permite así activar la expresión genética sin mutar el genoma.
Aunque este es solo un primer paso, todo apunta a que la nueva línea de investigación acabará abriendo muchas e interesantes perspectivas en investigación biomédica y, más a largo plazo, en la medicina. Para empezar, se espera obtener pronto nuevos y reveladores datos acerca de los mecanismos que controlan la activación embrionaria temprana de los genes.
Fuente NCYT