Quizás en los países hispanos como Argentina, México o España no es lo más normal. Pero en muchos lugares del mundo (y alguna que otra casa en nuestro país) es común que los anfitriones se quiten los zapatos a la puerta de casa y pidan que sus visitas hagan lo mismo.
Muchos creen que los que tenemos esta costumbre somos un poco “raritos” —más de una amiga me ha mirado raro al pedirle que se descalzara—, pero ahora la ciencia nos da la razón. Sí, ¡la razón! Igual no estamos tan mal, ¿eh?
Si dejas los zapatos a la entrada de casa, estás en lo cierto
Muchos creen que los que tenemos esta costumbre somos un poco “raritos” —más de una amiga me ha mirado raro al pedirle que se descalzara—, pero ahora la ciencia nos da la razón. Sí, ¡la razón! Igual no estamos tan mal, ¿eh?
Si dejas los zapatos a la entrada de casa, estás en lo cierto