Esta es la crisis climática de la que nadie ha oído hablar
El acelerado deshielo de la Antártida y el Ártico suele llevarse toda la atención mediática. Pero la Tierra tiene un ‘tercer polo’ del que nadie habla. Y, adivina, también se derrite a un ritmo alarmante.
Tercer polo. Así es como los glaciólogos se refieren a la meseta tibetana, hogar de la vasta capa de hielo del Hindu Kush-Himalaya, porque contiene la mayor cantidad de nieve y hielo después del Ártico y la Antártida.
Solo los glaciares chinos representan aproximadamente el 14.5% de todos los existentes en el planeta. Sin embargo, una cuarta parte de su hielo se ha perdido desde 1970. Y el ritmo del deshielo cada vez es más rápido. Según el Informe Especial sobre la Criósfera del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC), a este ritmo hasta dos tercios del glaciar habrán desaparecido en los próximos 80 años, incluso si se cumple el acuerdo internacional de limitar el calentamiento global a 1,5ºC.
Aunque hayamos oído hablar poco sobre él, el tercer polo es la fuente de diez de los ríos más grandes del mundo, incluidos el Ganges, el Brahmaputra, el Amarillo, el Mekong o el Indo. Los glaciares son una importante reserva de agua para los 250 millones de personas que viven en la región del Hindu Kush Himalaya (HKH) y las 1.650 millones de personas que dependen de los grandes ríos que nacen allí y fluyen hacia India, Pakistán, China y otros países.
“La pérdida será deprimente e inducirá al miedo porque cambiará la naturaleza de las montañas de una manera muy visible y profunda”, asegura a The Guardian Joseph Shea, glaciólogo de la Universidad del Norte de Columbia Británica.
El ritmo del deshielo en el tercer polo es tres veces más rápido que el promedio mundial debido a su altura
En estos momentos, los glaciares de la región están perdiendo aproximadamente medio metro vertical de hielo por año. Las nevadas de invierno han disminuido en la zona y, de promedio, hay cuatro noches frías menos y siete noches más cálidas por año que hace 40 años.
Al tratarse de una zona poblada, las consecuencias pueden ser devastadoras. Hasta ahora, pueblos enteros ya han sido arrasados e inundados por el crecimiento de los lagos glaciares. Los investigadores aseguran que el deshielo del Himalaya también fortalecerá los monzones que sacuden el sudeste asiático.
Aún así, no todo es malo. Estos cambios drásticos en el clima también han traído algunas consecuencias positivas. Las temperaturas más altas en invierno facilitan la vida en algunas zonas de la meseta y han impulsado un tipo de agricultura de regadío mucho más variada. Sin embargo, hay muchos otros lugares resentidos por el hecho de depender totalmente del agua del deshielo.
¿Por qué apenas oímos hablar del ‘tercer polo’?
Existen varios factores que han contribuido al silencio mediático. En primer lugar, existen menos investigaciones sobre el impacto del cambio climático en la meseta tibetana que en el Ártico o la Antártida. Segundo, porque el gobierno indio y otras partes interesadas han guardado celosamente los pocos datos existentes. Probablemente porque la contaminación de la zona ha afectado directamente a su calentamiento. Y tercero, porque la meseta tibetana es un lugar vasto y poco práctico para que los glaciólogos realicen las mediciones con comodidad.
Además de estos factores, el IPCC también pudo tener algo que ver cuando en 2007 publicó su cuarto informe de evaluación con una predicción sobre el tercer polo totalmente errónea. Su declaración decía que los glaciares del Himalaya habrían desaparecido en 2035. De modo que, probablemente por pudor, esta zona recibió menos atención en sus informes posteriores.
“Esta es la crisis climática de la que nadie ha oído hablar", afirma el principal científico del Centro Internacional para el Desarrollo Integrado de las Montañas (ICIMOD), Philippus Weste. Pues bien, es hora de hablar sobre ella. Porque el futuro de esta región y el de su gente nos afecta directamente a todos.
El acelerado deshielo de la Antártida y el Ártico suele llevarse toda la atención mediática. Pero la Tierra tiene un ‘tercer polo’ del que nadie habla. Y, adivina, también se derrite a un ritmo alarmante.
Tercer polo. Así es como los glaciólogos se refieren a la meseta tibetana, hogar de la vasta capa de hielo del Hindu Kush-Himalaya, porque contiene la mayor cantidad de nieve y hielo después del Ártico y la Antártida.
Solo los glaciares chinos representan aproximadamente el 14.5% de todos los existentes en el planeta. Sin embargo, una cuarta parte de su hielo se ha perdido desde 1970. Y el ritmo del deshielo cada vez es más rápido. Según el Informe Especial sobre la Criósfera del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC), a este ritmo hasta dos tercios del glaciar habrán desaparecido en los próximos 80 años, incluso si se cumple el acuerdo internacional de limitar el calentamiento global a 1,5ºC.
Aunque hayamos oído hablar poco sobre él, el tercer polo es la fuente de diez de los ríos más grandes del mundo, incluidos el Ganges, el Brahmaputra, el Amarillo, el Mekong o el Indo. Los glaciares son una importante reserva de agua para los 250 millones de personas que viven en la región del Hindu Kush Himalaya (HKH) y las 1.650 millones de personas que dependen de los grandes ríos que nacen allí y fluyen hacia India, Pakistán, China y otros países.
“La pérdida será deprimente e inducirá al miedo porque cambiará la naturaleza de las montañas de una manera muy visible y profunda”, asegura a The Guardian Joseph Shea, glaciólogo de la Universidad del Norte de Columbia Británica.
El ritmo del deshielo en el tercer polo es tres veces más rápido que el promedio mundial debido a su altura
En estos momentos, los glaciares de la región están perdiendo aproximadamente medio metro vertical de hielo por año. Las nevadas de invierno han disminuido en la zona y, de promedio, hay cuatro noches frías menos y siete noches más cálidas por año que hace 40 años.
Al tratarse de una zona poblada, las consecuencias pueden ser devastadoras. Hasta ahora, pueblos enteros ya han sido arrasados e inundados por el crecimiento de los lagos glaciares. Los investigadores aseguran que el deshielo del Himalaya también fortalecerá los monzones que sacuden el sudeste asiático.
Aún así, no todo es malo. Estos cambios drásticos en el clima también han traído algunas consecuencias positivas. Las temperaturas más altas en invierno facilitan la vida en algunas zonas de la meseta y han impulsado un tipo de agricultura de regadío mucho más variada. Sin embargo, hay muchos otros lugares resentidos por el hecho de depender totalmente del agua del deshielo.
¿Por qué apenas oímos hablar del ‘tercer polo’?
Existen varios factores que han contribuido al silencio mediático. En primer lugar, existen menos investigaciones sobre el impacto del cambio climático en la meseta tibetana que en el Ártico o la Antártida. Segundo, porque el gobierno indio y otras partes interesadas han guardado celosamente los pocos datos existentes. Probablemente porque la contaminación de la zona ha afectado directamente a su calentamiento. Y tercero, porque la meseta tibetana es un lugar vasto y poco práctico para que los glaciólogos realicen las mediciones con comodidad.
Además de estos factores, el IPCC también pudo tener algo que ver cuando en 2007 publicó su cuarto informe de evaluación con una predicción sobre el tercer polo totalmente errónea. Su declaración decía que los glaciares del Himalaya habrían desaparecido en 2035. De modo que, probablemente por pudor, esta zona recibió menos atención en sus informes posteriores.
“Esta es la crisis climática de la que nadie ha oído hablar", afirma el principal científico del Centro Internacional para el Desarrollo Integrado de las Montañas (ICIMOD), Philippus Weste. Pues bien, es hora de hablar sobre ella. Porque el futuro de esta región y el de su gente nos afecta directamente a todos.
Fuente PLAYGROUND