Los investigadores han publicado sus hallazgos en la edición de septiembre de la revista Journal of Craniofacial Surgery.
Proporción áurea
La proporción áurea es un número irracional que descubrieron pensadores de la Antigüedad al advertir el vínculo existente entre dos segmentos pertenecientes a una misma recta. Dicha proporción puede hallarse en la naturaleza (flores, hojas, etc.) y en figuras geométricas y se le otorga una condición estética: aquello cuyas formas respetan la proporción áurea es considerado bello.
Su ecuación se expresa como 1 más la raíz cuadrada de 5, todo sobre 2, y el resultado es aproximadamente igual a 1,61803398874989…
Según explica Rafael Tamargo, profesor de neurocirugía en la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins:
Los otros mamíferos que encuestamos en realidad tienen proporciones únicas que se acercan a la Proporción Áurea con una mayor sofisticación de especies. Creemos que este hallazgo puede tener importantes implicaciones antropológicas y evolutivas.
La evolución del cráneo ha sido un desafío de diseño en el que varias iteraciones finalmente han armonizado su estructura y funciones.
En el estudio se analizaron las dimensiones de la parte superior del neurocráneo y y quecubre la cavidad craneal que contiene el cerebro en varios mamíferos, suponiendo que la creciente complejidad del cerebro y la expansión del tamaño del cerebro podrían reflejarse externamente en esta medición.
Advierton así que que en humanos la proporción de la distancia en línea recta entre la sutura frontonasal y la protuberancia occipital externa sobre el arco parieto-occipital, así como la del arco parieto-occipital sobre el arco frontal, coinciden en 1.6, lo cual es sorprendentemente cercano al valor Φ de 1.618.
Además, los humanos tienen la menor diferencia entre las 2 proporciones craneales medidas de las 7 especies analizadas, lo que puede ser un indicador de sofisticación evolutiva.
Presumimos que el principio de la proporción áurea, que se ha documentado en otros sistemas biológicos y naturales, también puede estar presente en la arquitectura y la evolución del cráneo humano.
Fuente XATAKA