El Bacillus de Calmette y Guérin, más conocido en el mundo por la sigla BCG, es la vacuna contra la tuberculosis. El Instituto de Tecnología de Nueva York (NYIT) estimó que su aplicación podría implicar un "cambio de pantalla" en la lucha contra el coronavirus.
El equipo comparó las políticas de vacunación con BCG de varias naciones con la morbilidad y mortalidad del Covid-19 y encontró una "correlación positiva significativa" entre el año en que se adoptaron las políticas de vacunación universal con BCG y la tasa de mortalidad del país. Es decir: cuanto antes se estableciera una política, más probable sería que una porción significativa de la población, especialmente los ancianos, estuvieran protegidos, dijeron los investigadores.
Irán, por ejemplo, que tiene una política actual de vacunación universal con BCG, solo comenzó en 1984 y tiene una tasa de mortalidad elevada con 19,7 muertes por millón de habitantes. En contraste, Japón, que comenzó su política universal de BCG en 1947, tiene aproximadamente 100 veces menos muertes por millón de personas, con 0,28 según el estudio. Brasil, que comenzó la vacunación universal en 1920, tiene una tasa de mortalidad aún menor de 0,0573 muertes por millón de habitantes.
"Descubrimos que los países sin políticas universales de vacunación con BCG, como Italia, los Países Bajos y los Estados Unidos, se han visto más gravemente afectados en comparación con los países con políticas universales y duraderas de BCG", manifestó el grupo que dirige Gonzalo Otazu, profesor asistente de ciencias biomédicas en el NYIT.
La BCG ha existido durante casi un siglo y ha demostrado que es una herramienta eficaz para prevenir la meningitis y la tuberculosis diseminada en los niños, recordaron los investigadores estadounidenses. Los científicos estiman que la inoculación ofrece una protección de amplio alcance contra las infecciones respiratorias que presentan síntomas similares al Covid-19.
A medida que los casos de tuberculosis disminuyeron a fines del siglo XX, varios de los países de mayores ingresos en Europa abandonaron sus políticas universales de vacunación con BCG entre 1963 y 2010. Los investigadores señalaron que entre los 180 países con datos de BCG disponibles, 157 países recomiendan actualmente la vacunación universal con BCG. Los 23 países restantes la han suspendido, debido a una reducción en la incidencia de tuberculosis o a que tradicionalmente han favorecido la vacunación selectiva de los grupos de riesgo.
En la pandemia de coronavirus, Estados Unidos superó hoy los 200 mil infectados, con más de 4 mil muertes. Italia tiene 110 mil y 12 mil víctima fatales. Mientras que Holanda acumula 12 mil enfermos y mil decesos. La contracara, según los investigadores, es India.
Allí, la vacuna contra la tuberculoisis es parte del programa de inmunización universal y se administra a millones de niños al nacer o poco después. El país era uno de los de mayor tasa de tuberculosos en el mundo cuando se introdujo la vacunación masiva en 1948, poco después de la independencia del Reino Unido.
Mónica Gulati, decana de la Facultad de Medicina Apliicada en la Lovely Professional University, en Punjab, consideró que "cada pequeña cosa nos da un rayo de esperanza. Sería prematuro decir algo ahora. Pero el lado positivo es que la vacuna BCG también ha demostrado ser bastante efectiva contra la infección por SARS". En ese sentido, recordó que el SARS pertenece a la familia de los coronavirus.
"Entonces, dado que la pandemia actual es menos intensa en los países con intervención de vacuna BCG y que fue efectiva contra otro coronavirus, es motivo de esperanza", añadió.
Sin embargo, tomará tiempo y pruebas comprender cómo funciona la vacuna contra la tuberculosis en el caso del Covid-19, aseguró Deepak Verma, del departamento de Medicina Interna del Hospital Columbia Asia, en Ghaziabad. "Por ahora, el aislamiento y la cuarentena son la única forma establecida para prevenir una infección por coronavirus", especificó.
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