ROMA.- "El Covid-19 desde el punto de vista clínico no existe más ", dijo Alberto Zangrillo, el director de terapia intensiva del hospital San Raffaele de Milán, uno de los más importantes de Italia. Zangrillo, que fue médico personal del expremier Silvio Berlusconi, atacó también a los expertos del comité técnico-científico que asesoraron al gobierno y llamó a que Italia vuelva a la normalidad . Sus declaraciones que generaron una fuerte polémica, que llevó al ministerio de Salud italiano a aclarar que se trataba de definiciones "equivocadas".
Durante el programa Mezz'ora in piú, de Rai 3, Zangrillo habló sobre la situación en Lombardía, la región más castigada del país, y puso en duda las alarmas encendidas en las últimas semanas . "Me causa gracia: hoy es el 31 de mayo y hace un mes escuchábamos a los epidemiólogos decir que temían muchísimo una nueva oleada al inicio de junio y quién sabe cuántos lugares de terapia intensiva ocupados". opinó. "En realidad, el virus, prácticamente, desde el punto de vista clínico, no existe más", aseguró.
Sus palabras enseguida tuvieron gran impacto en Italia donde, en el segundo domingo sin cuarentena, la Protección Civil reportó otros 75 muertos por coronavirus y 355 casos en las últimas 24 horas, lo que que elevó el total a 33.415 fallecidos y 233.019 infecciones.
Zangrillo consideró que los tests de hisopado realizados en los últimos diez días tienen una "carga viral desde el punto de vista cuantitativo absolutamente infinitesimal respecto de los realizados sobre pacientes hace uno o dos meses atrás". Además, arremetió contra los expertos que "desde hace tres meses nos bombardean con una serie de números que tiene evidencia y valor cero ".
Especialmente acusó a algunos epidemiólogos que asesoraron al gobierno de Giuseppe Conte. "Todo esto ha llevado a bloquear a Italia mientras nosotros trabajábamos, pero ahora que hemos visto el drama, reclamamos poder volver a empezar velozmente porque queremos curar a las personas que no podemos curar", continuó. "Tenemos que volver a un país normal porque existen todas las evidencias de que este país puede desde hoy volver a tener una vida normal ", afirmó.
Poco más tarde, el Ministerio de Salud salió a contrastar estas declaraciones. "¿El virus ya no existe? Es un mensaje equivocado que confunde a los italianos", respondió Sandra Zampa, vicetitular de esta cartera. Zampa destacó que si las cosas mejoraron a nivel epidemiológico en Italia fue gracias a las medidas de lockdown tomadas por el gobierno que duraron casi dos meses. La funcionaria expresó su gratitud a los miembros del comité técnico-científico que asesoraron al gobierno y volvió a invitar a la población a tomar "la máxima prudencia, a mantener el distanciamiento físico, a evitar aglomeraciones, al lavado frecuente de manos y al uso del barbijo".
Los chalecos naranja
Esto es justamente lo que no hicieron ayer, en diveras manifestaciones, los denominados "chalecos naranja" , un nuevo grupo de los más heterogéneo, formado por exfascistas, desocupados e indignados por la crisis actual, cercanos a movimientos de ultraderecha , liderados por un controvertido viejo personaje de la política italiana, el exgeneral de los carabineros, Antonio Pappalardo.
Los "gilet arancioni" protestaron en diversas plazas de Italia en contra de la "dictadura sanitaria" implementada por el gobierno de Conte durante la pandemia por el Covid-19, un virus que para ellos "no existe", fue inventado, y sus durísimas consecuencias económicas.
Los "chalecos naranjas" ayer se juntaron con banderas de Italia en la emblemática Piazza del Duomo de Mián, donde Pappalardo, vestido de traje naranja, dio un encendido discurso. Todos fueron denunciados por la policía por haber violado las normas anticoronavirus: no respetaron la prohibición de aglomeraciones y tampoco usaron barbijo, algo obligatorio en Lombardía.
Durante el programa Mezz'ora in piú, de Rai 3, Zangrillo habló sobre la situación en Lombardía, la región más castigada del país, y puso en duda las alarmas encendidas en las últimas semanas . "Me causa gracia: hoy es el 31 de mayo y hace un mes escuchábamos a los epidemiólogos decir que temían muchísimo una nueva oleada al inicio de junio y quién sabe cuántos lugares de terapia intensiva ocupados". opinó. "En realidad, el virus, prácticamente, desde el punto de vista clínico, no existe más", aseguró.
Sus palabras enseguida tuvieron gran impacto en Italia donde, en el segundo domingo sin cuarentena, la Protección Civil reportó otros 75 muertos por coronavirus y 355 casos en las últimas 24 horas, lo que que elevó el total a 33.415 fallecidos y 233.019 infecciones.
Zangrillo consideró que los tests de hisopado realizados en los últimos diez días tienen una "carga viral desde el punto de vista cuantitativo absolutamente infinitesimal respecto de los realizados sobre pacientes hace uno o dos meses atrás". Además, arremetió contra los expertos que "desde hace tres meses nos bombardean con una serie de números que tiene evidencia y valor cero ".
Especialmente acusó a algunos epidemiólogos que asesoraron al gobierno de Giuseppe Conte. "Todo esto ha llevado a bloquear a Italia mientras nosotros trabajábamos, pero ahora que hemos visto el drama, reclamamos poder volver a empezar velozmente porque queremos curar a las personas que no podemos curar", continuó. "Tenemos que volver a un país normal porque existen todas las evidencias de que este país puede desde hoy volver a tener una vida normal ", afirmó.
Poco más tarde, el Ministerio de Salud salió a contrastar estas declaraciones. "¿El virus ya no existe? Es un mensaje equivocado que confunde a los italianos", respondió Sandra Zampa, vicetitular de esta cartera. Zampa destacó que si las cosas mejoraron a nivel epidemiológico en Italia fue gracias a las medidas de lockdown tomadas por el gobierno que duraron casi dos meses. La funcionaria expresó su gratitud a los miembros del comité técnico-científico que asesoraron al gobierno y volvió a invitar a la población a tomar "la máxima prudencia, a mantener el distanciamiento físico, a evitar aglomeraciones, al lavado frecuente de manos y al uso del barbijo".
Los chalecos naranja
Esto es justamente lo que no hicieron ayer, en diveras manifestaciones, los denominados "chalecos naranja" , un nuevo grupo de los más heterogéneo, formado por exfascistas, desocupados e indignados por la crisis actual, cercanos a movimientos de ultraderecha , liderados por un controvertido viejo personaje de la política italiana, el exgeneral de los carabineros, Antonio Pappalardo.
Los "gilet arancioni" protestaron en diversas plazas de Italia en contra de la "dictadura sanitaria" implementada por el gobierno de Conte durante la pandemia por el Covid-19, un virus que para ellos "no existe", fue inventado, y sus durísimas consecuencias económicas.
Los "chalecos naranjas" ayer se juntaron con banderas de Italia en la emblemática Piazza del Duomo de Mián, donde Pappalardo, vestido de traje naranja, dio un encendido discurso. Todos fueron denunciados por la policía por haber violado las normas anticoronavirus: no respetaron la prohibición de aglomeraciones y tampoco usaron barbijo, algo obligatorio en Lombardía.
Fuente LA NACION