La historia de la humanidad que conocemos, no es más que un grano de arena, en el vasto desierto de los registros sobre la creación del mundo que habitamos.
De hecho, desde años, científicos han tomado en cuenta la hipótesis de que la humanidad no es la primera civilización avanzada en habitar la Tierra.
Pero esta teoría no aparece de la nada; el hallazgo de artefactos extraños y desconocidos, además de la historia oculta entre los registros más longevos de la humanidad, han ofrecido a los expertos una visión diferente sobre aquellos años que los historiadores tradicionales se han dedicado a eliminar.
En estos escritos podemos encontrar descripciones tecnológicas actuales e, incluso, mucho más avanzadas; naves voladoras, metafísica, tecnología cuántica, entre otros. De esta forma, se han descubierto las armas de los dioses que fueron usadas en nuestro mundo.
Historia oculta y las armas de los dioses
Algunos textos que mencionan este tipo de tecnología oculta son el Rigveda y el Mahabharata. Textos muy antiguos, al punto de ser considerados de los más longevos de la humanidad.
De hecho, los historiadores no llegan a un consenso sobre el origen del Rigveda; algunos lo datan de 6.000 años, otros de 9.000. Sin embargo, aunque se consiga saber la fecha exacta de cuando se escribió, ésta sería errónea, pues estos himnos dedicados a los dioses eran transmitidos vía oral antes de ser transcritos en sánscrito védico.
Las líneas que se han traducido hasta el momento, aluden una historia que parece sacada de un libro de fantasía épica: viajes a la luna, modificación climática, lanzamientos de bombas nucleares, descritas como una «torta amarilla» capaz de arrasar con todo a su paso.
También se hace mención a sofisticadas naves espaciales, al plasma físico y un armamento termo-acústico, capaz de hacer daño en una escala masiva.
Incluso podemos encontrar referencias a los viajes temporales y de realidades paralelas. Si leemos una traducción literal del Rigveda, encontramos lo siguiente:
«El mundo exterior (espacio temporal actual) es el espejo del sustrato interno que soporta todos los aspectos temporales, todo lo que ocurre en los reinos aparentemente temporales es un reflejo del sustrato que existe dentro-debajo.»
Entonces, podemos dar fe, que las civilizaciones que existieron antes de la humanidad en la Tierra, las cuales fueron denominadas como dioses por los primeros especímenes humanos, ya dominaban de una manera tan avanzada la metafísica, que eran capaces de emplear la ciencia interdimensional y librar una guerra de proporciones épicas.
La tecnología avanzada usada por los dioses
Las traducciones realizadas al Rigveda y al Mahabharata nos han dejado claras evidencias de tecnología aeronáutica, espacial y armamentista única.
Entre la tecnología aeronáutica podemos encontrar naves espaciales capaces de realizar viajes imposibles para la humanidad. Las Pushpakas, por ejemplo, eran naves en forma de cigarro capaces de salir al espacio.
Por otro lado, también se mencionan a las Astras o las Vimanas de cualquier especie. Estos vehículos podían volar a grandes velocidades dentro de la Tierra y salir fuera de la atmósfera.
Las armas de los dioses también son un tema importante, mencionado en los textos más antiguos del planeta. Se mencionan de todo tipo, desde armas portátiles hasta armas de destrucción masiva.
Las primeras son mencionadas con más frecuencia usadas por dioses antiguos. Soma, por ejemplo, usaba un arma que de plasma. Pero no es el único; Indra, un arma de fuerza de energía cinética capaz de incendiar todo a su paso y generar luz.
Agni, un arma de fuego que emite radiación y emplea la fuerza bárica. Surya, un arma que emite radiación directa o concentrada, y por último nos encontramos con la Rudra, cuya arma generaba emisiones sónicas destructivas.
Las armas de los dioses, de destrucción masiva, aunque menos frecuentes, también toman un papel importante en la historia antigua. Sus nombres son diferentes a los conocidos en la actualidad, pero la descripción de lo que son capaces de hacer nos explican claramente lo que son.
El Devastra es sin duda un misil termobárico capaz de ejercer presión y calor por partes iguales y en cantidades mortales a gran escala. Asurastra se trata de un misil biológico o bioarma. Brahmastra hace referencia a un misil de neutrones que no genera un alto impacto explosivo, pero que expande grandes cantidades de radiación ionizada. Por último, nos encontramos con la Ganvida, un misil de radiación abierta capaz de arrasar con ciudades enteras.
Asimismo, la cosmología sumeria también menciona armas relacionadas a sus dioses, una de ellas es asignada a Inanna, donde libra una batalla con sus familiares usando una gran arma, la Gandiva.
Otra de ellas es nombrada en la epopeya babilónica de la creación, el Enuma Elish; en la cual se registra la batalla entre el dios del cielo Marduk (Bel) y la serpiente Tiamat. Ahí, se detalla como Marduk tenía poderosas armas que incluían un arco, una maza y una red para usar en su batalla contra Tiamat. Las imágenes de esta escena épica pueden apreciarse en tablillas que muestran a Marduk sosteniendo un cetro de tres puntas en su mano.
También puede interesarte: Textos de más de 6.000 años mencionan naves interestelares que visitaron la Tierra.
Los misterios de nuestro planeta son muchos, al punto de no saber si somos la única civilización desarrollada que lo habitó. Sin embargo, la tecnología, las naves voladoras y las armas de los dioses nos dan a entender que, efectivamente, el mundo fue el escenario de antiguas guerras avanzadas.
Algunos textos que mencionan este tipo de tecnología oculta son el Rigveda y el Mahabharata. Textos muy antiguos, al punto de ser considerados de los más longevos de la humanidad.
De hecho, los historiadores no llegan a un consenso sobre el origen del Rigveda; algunos lo datan de 6.000 años, otros de 9.000. Sin embargo, aunque se consiga saber la fecha exacta de cuando se escribió, ésta sería errónea, pues estos himnos dedicados a los dioses eran transmitidos vía oral antes de ser transcritos en sánscrito védico.
Las líneas que se han traducido hasta el momento, aluden una historia que parece sacada de un libro de fantasía épica: viajes a la luna, modificación climática, lanzamientos de bombas nucleares, descritas como una «torta amarilla» capaz de arrasar con todo a su paso.
También se hace mención a sofisticadas naves espaciales, al plasma físico y un armamento termo-acústico, capaz de hacer daño en una escala masiva.
Incluso podemos encontrar referencias a los viajes temporales y de realidades paralelas. Si leemos una traducción literal del Rigveda, encontramos lo siguiente:
«El mundo exterior (espacio temporal actual) es el espejo del sustrato interno que soporta todos los aspectos temporales, todo lo que ocurre en los reinos aparentemente temporales es un reflejo del sustrato que existe dentro-debajo.»
Entonces, podemos dar fe, que las civilizaciones que existieron antes de la humanidad en la Tierra, las cuales fueron denominadas como dioses por los primeros especímenes humanos, ya dominaban de una manera tan avanzada la metafísica, que eran capaces de emplear la ciencia interdimensional y librar una guerra de proporciones épicas.
La tecnología avanzada usada por los dioses
Las traducciones realizadas al Rigveda y al Mahabharata nos han dejado claras evidencias de tecnología aeronáutica, espacial y armamentista única.
Entre la tecnología aeronáutica podemos encontrar naves espaciales capaces de realizar viajes imposibles para la humanidad. Las Pushpakas, por ejemplo, eran naves en forma de cigarro capaces de salir al espacio.
Por otro lado, también se mencionan a las Astras o las Vimanas de cualquier especie. Estos vehículos podían volar a grandes velocidades dentro de la Tierra y salir fuera de la atmósfera.
Las armas de los dioses también son un tema importante, mencionado en los textos más antiguos del planeta. Se mencionan de todo tipo, desde armas portátiles hasta armas de destrucción masiva.
Las primeras son mencionadas con más frecuencia usadas por dioses antiguos. Soma, por ejemplo, usaba un arma que de plasma. Pero no es el único; Indra, un arma de fuerza de energía cinética capaz de incendiar todo a su paso y generar luz.
Agni, un arma de fuego que emite radiación y emplea la fuerza bárica. Surya, un arma que emite radiación directa o concentrada, y por último nos encontramos con la Rudra, cuya arma generaba emisiones sónicas destructivas.
Las armas de los dioses, de destrucción masiva, aunque menos frecuentes, también toman un papel importante en la historia antigua. Sus nombres son diferentes a los conocidos en la actualidad, pero la descripción de lo que son capaces de hacer nos explican claramente lo que son.
El Devastra es sin duda un misil termobárico capaz de ejercer presión y calor por partes iguales y en cantidades mortales a gran escala. Asurastra se trata de un misil biológico o bioarma. Brahmastra hace referencia a un misil de neutrones que no genera un alto impacto explosivo, pero que expande grandes cantidades de radiación ionizada. Por último, nos encontramos con la Ganvida, un misil de radiación abierta capaz de arrasar con ciudades enteras.
Asimismo, la cosmología sumeria también menciona armas relacionadas a sus dioses, una de ellas es asignada a Inanna, donde libra una batalla con sus familiares usando una gran arma, la Gandiva.
Otra de ellas es nombrada en la epopeya babilónica de la creación, el Enuma Elish; en la cual se registra la batalla entre el dios del cielo Marduk (Bel) y la serpiente Tiamat. Ahí, se detalla como Marduk tenía poderosas armas que incluían un arco, una maza y una red para usar en su batalla contra Tiamat. Las imágenes de esta escena épica pueden apreciarse en tablillas que muestran a Marduk sosteniendo un cetro de tres puntas en su mano.
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Los misterios de nuestro planeta son muchos, al punto de no saber si somos la única civilización desarrollada que lo habitó. Sin embargo, la tecnología, las naves voladoras y las armas de los dioses nos dan a entender que, efectivamente, el mundo fue el escenario de antiguas guerras avanzadas.
Fuente MYSTERY SCIENCE