Es verdad que, al hacer más ejercicio físico, también puede aumentar el apetito y que esto, si no se toman precauciones y se acaba comiendo más, puede sabotear el gasto de calorías logrado con el ejercicio. Pero hay también otros factores que pueden tener papeles importantes.
El equipo internacional de John Speakman, del Instituto de Tecnología Avanzada de Shenzhen (SIAT), dependiente de la Academia China de Ciencias, ha llegado a la conclusión de que el ejercicio físico, paradójicamente, reduce significativamente la cantidad de calorías quemadas en reposo en personas con obesidad.
Los investigadores han determinado que las personas que hacen ejercicio queman menos calorías en el mantenimiento del cuerpo, por lo que se reducen la pérdida de peso promovida por la quema de calorías durante el ejercicio físico. Esta reducción de la energía consumida en reposo es más pronunciada en los individuos con obesidad y también, aunque en menor medida, en las personas de edad avanzada.
La nueva investigación revela una importante causa de la dificultad de perder kilos cuando la persona tiene obesidad.
Estas conclusiones se basan en los resultados de analizar datos de 1.750 adultos. El análisis realizado por el equipo de investigación mostró que en los individuos con el índice de masa corporal (IMC) más alto, solo el 51% de las calorías quemadas durante el ejercicio físico se traducen en calorías totales quemadas al final del día. En cambio, en los que tenían un IMC normal, el 72% de las calorías quemadas durante el ejercicio físico se reflejaban en el gasto total de calorías al final del día.
El estudio se titula “Energy compensation and adiposity in humans”. Y se ha publicado en la revista académica Current Biology. (Fuente: NCYT de Amazings)
Fuente NCYT