Los sumerios miraron al cielo mientras inventaban el sistema del tiempo y todavía lo usamos hoy. Puede resultar curioso que dividamos las horas en 60 minutos y los días en 24 horas, ¿por qué no un múltiplo de 10 o 12? En pocas palabras, la respuesta es porque los inventores del tiempo no operaron en un sistema decimal (base 10) o duodecimal (base 12), sino en un sistema sexagesimal (base 60).
Para los antiguos innovadores sumerios que primero dividieron los movimientos del cielo en intervalos contables, 60 era el número perfecto. El número 60 se puede dividir en 1, 2, 3, 4, 5, 6, 10, 12, 15, 20 y 30 partes iguales. Además, los astrónomos antiguos creían que había 360 días en un año, un número que encajaría perfectamente en seis tiempos. El Imperio sumerio no duró. Sin embargo, durante más de 5.000 años, el mundo ha mantenido su compromiso con la delimitación del tiempo.
Fuente: mitología y arqueología ancestral
Para los antiguos innovadores sumerios que primero dividieron los movimientos del cielo en intervalos contables, 60 era el número perfecto. El número 60 se puede dividir en 1, 2, 3, 4, 5, 6, 10, 12, 15, 20 y 30 partes iguales. Además, los astrónomos antiguos creían que había 360 días en un año, un número que encajaría perfectamente en seis tiempos. El Imperio sumerio no duró. Sin embargo, durante más de 5.000 años, el mundo ha mantenido su compromiso con la delimitación del tiempo.
Fuente: mitología y arqueología ancestral