El año pasado, durante el mes de agosto, la empresa china NetDragon Websoft, especializada en juegos multijugador y aplicaciones para móviles, nombró como CEO (o director ejecutivo) a una inteligencia artificial en una de sus principales filiales, Fujian NetDragon Websoft. Seis meses después, la gestión de esta IA hizo crecer a la empresa un 10% en bolsa.
La inteligencia artificial y sobre todo ChatGPT están llegando a producir un tipo de ansiedad, 'AI-nxiety', que está llevando a miles de personas a pensar que esta tecnología sustituirá miles de puestos de trabajo de todo tipo. Algo como la cadena de montaje de Henry Ford, pero a gran escala. Afirmaciones como la del Foro Económico Mundial, que en 2020 predijo que aproximadamente 85 millones de puestos de trabajo podrían ser desplazados para 2025, reconociendo que la automatización en la fuerza laboral ha aumentado a un ritmo más rápido de lo previsto, no son nada tranquilizadoras. Mientras que en un principio se dio por hecho que se automatizarían los trabajos más pesados y mecánicos, ChatGPT, Midjourney, DALL-E o Stable Diffusion vinieron a demostrar que las artes, la literatura y hasta la programación también son cosa de máquinas.
Ahora, la inteligencia artificial Tang Yu, la CEO nombrada por NetDragon, viene a meter miedo a los altos cargos ya que en sus primeros seis meses de gestión, ha conseguido aumentar un 10% en la bolsa de Hong Kong elevando el valor de la empresa, incluso están superando a la Bolsa de Valores de Hong Kong en general, de acuerdo con los datos mostrados en The Hustle.
Aunque lo de las IA en puestos de poder viene de lejos. Ya en 2018, un robot se presentó a la alcaldía de un distrito de Tokio para acabar con la corrupción. De hecho, este robot, llamado Michihito Matsuda, consiguió quedar en tercer puesto con 4.013 votos. Un panorama que ya anticipó la serie de anime 'Evangelion', donde la toma de decisiones recae en MAGI, una superinteligencia que gobierna Tokio-3.
"Creemos que la IA es el futuro de la gestión corporativa, y nuestro nombramiento de la Señorita Tang Yu representa nuestro compromiso de adoptar realmente el uso de la inteligencia artificial para transformar la forma en que operamos nuestro negocio y, en última instancia, impulsar nuestro crecimiento estratégico futuro", explicó el presidente de NetDragon, Dejian Liu, en un comunicado de prensa en agosto pasado.
"Seguiremos ampliando nuestros algoritmos detrás de Tang Yu para construir un modelo de gestión abierto, interactivo y altamente transparente, a medida que nos transformamos gradualmente en una comunidad de trabajo basada en metaverso, lo que nos permitirá atraer una base mucho más amplia de talentos en todo el mundo y nos puso en una posición para lograr metas más grandes ", añade en el documento.
Un liderazgo impecable a coste cero
En NetDragon, cuyos ingresos anuales rozan los 2.100 millones de dólares (alrededor de 1.950 millones de euros), la IA Tang Yu es responsable de todas las funciones típicas de un testaferro de la empresa, revisa análisis de alto nivel, toma decisiones de liderazgo, evalúa riesgos y fomenta un lugar de trabajo eficiente.
La diferencia es que no necesita descansar, no tiene familia que atender ni se pone enferma, trabaja las 24 horas del día, los 7 días de la semana, no necesita dormir, comer, ni una pausa para el café y además su sueldo no tiene nada que ver con los honorarios que suelen cobrar los cargos equivalentes. Tang Yu recibe cero euros anuales brutos por su trabajo.
Hay que tener en cuenta que en las empresas 'Fortune 500' (las quinientas mayores empresas estadounidenses) el salario promedio de los directores ejecutivos ahora es de alrededor de 16 millones de dólares por año (más de 14 millones de euros). De hecho, en los últimos 45 años, el salario promedio de los directores ejecutivos ha aumentado en un 1.460 % mientras que el de los trabajadores sólo ha aumentado un 18%. El resultado es que un director ejecutivo recibe de media el equivalente a lo que cobran 399 trabajadores.
Cuanto más grande es la empresa, más alta es esta diferencia. Por ejemplo, en 2021, el director ejecutivo de Amazon, Andy Jassey, recibió un paquete por valor de 213 millones de dólares (más de 197 millones de euros), equivalente alsalario colectivo de unos 6.474 empleados de Amazon. Una fuerza salarial que será suficiente como para gestionar al completo cuatro centros logísticos de la compañía. La exitosa gestión de Tang Yu por ahora es única, pero quién sabe si al echar cuentas del coste de mantener altos cargos humanos, otras grandes empresas opten por imitar el modelo de NetDragon.
La inteligencia artificial y sobre todo ChatGPT están llegando a producir un tipo de ansiedad, 'AI-nxiety', que está llevando a miles de personas a pensar que esta tecnología sustituirá miles de puestos de trabajo de todo tipo. Algo como la cadena de montaje de Henry Ford, pero a gran escala. Afirmaciones como la del Foro Económico Mundial, que en 2020 predijo que aproximadamente 85 millones de puestos de trabajo podrían ser desplazados para 2025, reconociendo que la automatización en la fuerza laboral ha aumentado a un ritmo más rápido de lo previsto, no son nada tranquilizadoras. Mientras que en un principio se dio por hecho que se automatizarían los trabajos más pesados y mecánicos, ChatGPT, Midjourney, DALL-E o Stable Diffusion vinieron a demostrar que las artes, la literatura y hasta la programación también son cosa de máquinas.
Ahora, la inteligencia artificial Tang Yu, la CEO nombrada por NetDragon, viene a meter miedo a los altos cargos ya que en sus primeros seis meses de gestión, ha conseguido aumentar un 10% en la bolsa de Hong Kong elevando el valor de la empresa, incluso están superando a la Bolsa de Valores de Hong Kong en general, de acuerdo con los datos mostrados en The Hustle.
Aunque lo de las IA en puestos de poder viene de lejos. Ya en 2018, un robot se presentó a la alcaldía de un distrito de Tokio para acabar con la corrupción. De hecho, este robot, llamado Michihito Matsuda, consiguió quedar en tercer puesto con 4.013 votos. Un panorama que ya anticipó la serie de anime 'Evangelion', donde la toma de decisiones recae en MAGI, una superinteligencia que gobierna Tokio-3.
"Creemos que la IA es el futuro de la gestión corporativa, y nuestro nombramiento de la Señorita Tang Yu representa nuestro compromiso de adoptar realmente el uso de la inteligencia artificial para transformar la forma en que operamos nuestro negocio y, en última instancia, impulsar nuestro crecimiento estratégico futuro", explicó el presidente de NetDragon, Dejian Liu, en un comunicado de prensa en agosto pasado.
"Seguiremos ampliando nuestros algoritmos detrás de Tang Yu para construir un modelo de gestión abierto, interactivo y altamente transparente, a medida que nos transformamos gradualmente en una comunidad de trabajo basada en metaverso, lo que nos permitirá atraer una base mucho más amplia de talentos en todo el mundo y nos puso en una posición para lograr metas más grandes ", añade en el documento.
Un liderazgo impecable a coste cero
En NetDragon, cuyos ingresos anuales rozan los 2.100 millones de dólares (alrededor de 1.950 millones de euros), la IA Tang Yu es responsable de todas las funciones típicas de un testaferro de la empresa, revisa análisis de alto nivel, toma decisiones de liderazgo, evalúa riesgos y fomenta un lugar de trabajo eficiente.
La diferencia es que no necesita descansar, no tiene familia que atender ni se pone enferma, trabaja las 24 horas del día, los 7 días de la semana, no necesita dormir, comer, ni una pausa para el café y además su sueldo no tiene nada que ver con los honorarios que suelen cobrar los cargos equivalentes. Tang Yu recibe cero euros anuales brutos por su trabajo.
Hay que tener en cuenta que en las empresas 'Fortune 500' (las quinientas mayores empresas estadounidenses) el salario promedio de los directores ejecutivos ahora es de alrededor de 16 millones de dólares por año (más de 14 millones de euros). De hecho, en los últimos 45 años, el salario promedio de los directores ejecutivos ha aumentado en un 1.460 % mientras que el de los trabajadores sólo ha aumentado un 18%. El resultado es que un director ejecutivo recibe de media el equivalente a lo que cobran 399 trabajadores.
Cuanto más grande es la empresa, más alta es esta diferencia. Por ejemplo, en 2021, el director ejecutivo de Amazon, Andy Jassey, recibió un paquete por valor de 213 millones de dólares (más de 197 millones de euros), equivalente alsalario colectivo de unos 6.474 empleados de Amazon. Una fuerza salarial que será suficiente como para gestionar al completo cuatro centros logísticos de la compañía. La exitosa gestión de Tang Yu por ahora es única, pero quién sabe si al echar cuentas del coste de mantener altos cargos humanos, otras grandes empresas opten por imitar el modelo de NetDragon.
Fuente EL MUNDO
Etiquetas
Inteligencia artificial