Geólogos del Centro de Investigaciones en Ciencias de la Tierra (CICTERRA, CONICET-UNC) determinaron que hace 560 millones de años, Córdoba tenía mar.
En las rocas está la respuesta
El descubrimiento de una roca llamada «Cordierita» que tiene origen marino fue la clave del hallazgo científico.
A su vez, en las Sierras de Córdoba, hay una extensa variedad de rocas metamórficas, entre ellas los mármoles, que provienen de una roca denominada caliza, que se forma en mares poco profundos y climas tropicales a subtropicales.
La presencia de estas rocas indica que existieron antiguos mares que fueron eliminados al generarse montañas y sus sedimentos se transformaron hasta constituirse en mármoles.
Un poco de historia
Córdoba se encontraba situada en un borde costero que miraba hacia el oeste (como si fuera hoy Chile) cuando no estaba formada la Cordillera de Los Andes y Sudamérica estaba unida al continente africano.
El mar que había por aquel entonces -llamado Climene- era poco profundo y estaba habitado por bacterias, algas y esponjas.
Fuente VIX
