Es importante tomar en cuenta que hoy no estamos en el mejor de los mundos, ya que lo que viene va a ser aun peor. No lo digo para asustar a la gente, sino más que todo para utilizar el método preventivo. Peor en nuestra región, porque en el resto del mundo ya están saliendo. Viene el invierno, el otoño que arrancó fresco y esto implica que se van a incrementar todos los niveles de contagios de todo tipo.
Ahora, ¿por qué la motivación es importante para esta etapa? Porque cuando uno ve todo eso se pregunta ¿de qué me voy a motivar? Me escondo y se acabó. Ahí es donde hay que trabajar la automotivación. Y es importante trabajarla, porque no estar motivados y tener estrés, nos va a generar una situación no conveniente para el cuerpo físico.
Entonces lo primero que tenemos que comprender es que existe muy silenciosamente, un síndrome que se llama síndrome motivacional, también conocido como amotivacional, sin motivación.
Este síndrome que es oculto, tiene muchas similitudes con la depresión, sin llegar a serlo. Vamos a dar las características, porque quizás uno esté circulando o caminando por el síndrome motivacional y no se dió cuenta. Son sensaciones que tienen que ver con nuestro ser interno. Esas características en realidad van a ser los síntomas. Porque el síndrome motivacional, primero nos genera una sintomatología psicológica, para luego ir al plano físico.
¿Cuáles son las características o los síntomas del síndrome motivacional o amotivacional?
1.- La apatía
Es un desinterés permanente. Se siente desmotivado con respecto a la vida y nada te llama la atención, ni hace que te sientas con ganas de hacer cosas o hasta de caminar. Uno dice no quiero caminar, mejor me quedo en casa.
2.- Sin planes futuros
Carecés de objetivos vitales. Aparece desinterés, no aparecen los planes futuros. El futuro mucho no te preocupa. Y no solo el futuro sino también las proyecciones laborales o la vida, o las amistades.
3.- La pasividad
Pasividad es no estar en paz. La pasividad es estar ante el entorno sin ningún estímulo que me llame. O sea, en el momento que tengo que hacer alguna actividad solo acompaño.
4.- El conformismo
Ejemplos de conformismo: Te tiran un hueso, bueno está bien… Estoy hace 100 años en un trabajo. Es una falta de objetivo vital y empieza a fallar el desarrollo personal, uno se queda y aparece la zona de confort.
5.- Pérdida de principios o pérdida de ideales
Se pierde el sentido de la vida, porque cada uno tiene un sentido de algo y lo pierde. Se desgana y lo va perdiendo. Pierde ese brillo interno.
6.- Pérdida de emociones
Van a ver que muchas características se entrelazan. No se experimenta esa sensación de decir: ¡qué lindo!, ¡qué bueno! Todos esos sentimientos van construyendo al ser.
7.- El aislamiento
Una persona no quiere tener contacto con otra, eso sería el aislamiento. Es eso que decís, no bueno mejor me quedo. O te aíslan, porque ya no encajo, o justamente, voy por otro camino.
8.- La introversión
Toda esa capacidad de atención externa se va minimizando; y estoy muy adentro. En mis pensamientos.
9.- La tristeza
Uno no identifica el motivo, pero está triste. Uno vive nostálgico y cada vez se siente más fuerte. Y eso me genera una gran tristeza.
10.- La falta del afecto
Ya no tenés lazos con los individuos de tu entorno, por un motivo u otro.
11.- El deterioro de las habilidades sociales
Justamente, te cuesta relacionarte con otros y no sabés cómo relacionarte con otros. Te sentís perdido, no me relaciono, me aíslo.
12.- Disminución en la concentración
Ahí empieza el deterioro cognitivo. La memoria empieza a infectarse también.
13.- Lentitud de movimientos y disminución de reflejos
Comenzás a ser más lento y con menos reflejos.
14.- Abandono del cuidado personal
Aunque parezca mentira, este síndrome es muy estudiado porque en paralelismo, todas estas características las tienen las personas que consumen cannabis. Más aún, hay todo un estudio muy profundo con este síndrome motivacional, cuando vos tenés una persona consumidora de cannabis, si el cannabis lo llevo a hacer todo eso. Porque eso ocurre después o eso lo llevó al cannabis. Hay toda una situación muy profunda de estudio. Esto lo doy como asterisco para aquellas personas que vivencian o tienen familiares, que entiendan que es muy factible que hayan tenido un síndrome motivacional que los haya llevado al cannabis. Pero el cannabis después genera un síndrome motivacional mucho más fuerte. Es un círculo vicioso.
Es ahí donde se trabaja fuertemente este tema de adicción.
¿Cómo salgo de todo esto?
Primero, reconociendo toda esta sintomatología, que no es poca cosa. Uno lo puede trabajar y es muy importante el tema de la motivación, porque a veces no le prestamos una correcta atención. Pero uno debe pensar que la motivación en realidad, está presente en las funciones básicas de la vida. Como el acto de comer, por ejemplo, en donde la motivación es: tengo hambre y voy a comer. O la educación o cultivarse por el deseo al conocimiento, son los basales.
Pero cuando la automotivación falla, los basales también son influenciados. La motivación humana hace que el humano sea quien es. Esa pulsión de vida, también es motivación.
La realidad que estar amotivado o desmotivado, te lleva a que uno no pueda desarrollar sus habilidades internas y crecer. Y ahí es donde uno comienza también, ese circulo destructivo.
Es ahí que cuando realmente tiene automotivación, tiene una habilidad muy importante en sus manos y yo diría, la gran habilidad. Las personas automotivadas, son las que llegan y las que salen de la mediocridad, los que nunca abandonan. Los que no poseen automotivación, son los que nunca pueden alcanzar eso que buscan. Y la realidad que, para evadir, va a utilizar cualquier método, cualquier excusa.
Nosotros a lo largo de la vida, enfrentamos, confrontamos, vivimos situaciones vitales complicadas. No hay nadie que tenga la vida tan simple. Siempre una media o pequeña o gran complicación aparece. Y la automotivación es la fuerza, por eso es importante tenerla, te va a impulsar a superar la complicación.
Tal es así que es la clave para alcanzar todos los objetivos. Que, a lo último, te va a llevar a eso que busca todo ser humano, la felicidad.
La automotivación está relacionada con lo que mucho tiempo hablamos y seguiremos hablando, que es la inteligencia emocional, es una habilidad de la inteligencia emocional, es una herramienta.
¿Cuáles estrategias podemos utilizar para la automotivación y qué herramientas?
Para construir niveles altos de automotivación, necesitamos ciertos factores que hay que cultivar en la persona, ahí es donde se hace el trabajo interno, terapia, o lo que sea.
Factores a trabajar para construir niveles altos de automotivación.
1.- La autoconfianza.
Confianza en uno mismo. Y ¿cómo puedo trabajar la confianza si me siento un mediocre?
Primero debés tener un núcleo que te genere confianza en vos. Que no vea en vos el último orejón del tarro, que hacés todo mal, que no servís para nada, etc. Porque como no está en vos, tiene que venir de alguna manera. Justamente, la autoconfianza es vital en todo esto. Cuando está golpeada, lamentablemente viene por nuestros ancestros (papá, mamá, abuelos) de manera inconsciente. No porque había un plan macabro de autodestrucción. Pero sin querer lo han hecho desde: “Correte que mejor lo hago yo”. O un niño hace algo y se le dice “podés hacerlo mejor, esto está mal”. Así se va minando la autoconfianza.
La autoconfianza la minás con los premios y castigos. O mostrándote marcadores de diferencia. Ves un niño que tiene un poquito de kilos y le decís gordito. “Vos no naciste para el deporte, correte”. “Sos medio inútil”. “Si no fuera por mí, vos no existís. ¿Qué hacés con eso?”
Todo eso mina la autoconfianza; y no hay autoconfianza. Trabajarlo en terapia es medio difícil.
Entonces necesitás un círculo virtuoso que te genere autoconfianza.
Para seguir trabajando la autoconfianza, una vez que te estimulan, aparece la autoeficacia. Me doy cuenta que lo pude hacer, me doy cuenta que lo hice.
Ahí es donde también hay un doble juego con los niños, que vos le generás autoconfianza, cuando le estás mostrando que tienen autoeficacia. Ej.: hicieron bien algo y vos le decís: ¡qué bien! Entonces la confianza crece.
Miren un error grave sin querer de los ancestros: Un niño lleva un plato o una copa a la mesa y se le rompe. Y a veces, hay padres que lo insultan. Gravísimo. Le minaste su autoeficacia. Papá me dijo que soy un idiota, que tengo manos de manteca.
Sucede al revés también. Cuando están con sus padres, sus madres o abuelos, que ya están en esa etapa de ocaso, como todos lo vamos a tener. Se van ocultando de a poquito, vamos a llegar a los 100 años y vamos a dejar el cuerpo. Es muy importante que el anciano sienta que es auto eficaz, para que tenga autoconfianza. Pero en estas culturas occidentales, ocurre todo lo contrario, los hacés sentir como molestos, estorbos y torpes. No va por ahí.
Para arriba y para abajo.
¿Si hace algo que es incorrecto? Hay muchas maneras de hablarlo. Pero no de hacerlos sentir torpes, molestos y tontos. Todo lo contrario.
Igual es la cultura de occidente en donde no hay tanto respeto ancestral. Por eso estamos hablando de este tema.
2.- Pensamiento positivo.
Es muy importante mirar todas las cosas de forma positiva. Sobre todo, cuando las cosas no salen. Nuestros pensamientos siempre influyen en nuestros éxitos o fracasos.
Se ha estudiado que justamente la clave para estar motivado es ser optimista. El optimista es aquel que tiene pensamiento positivo. ¿cómo están con el pensamiento positivo? ¿son optimistas?
3.- Metas realistas.
Tener objetivos claros, concretos. O sea, ir hacia una dirección. No que el viento me lleva por acá, por allá, no sé… Todo tiene que ser un reto. Voy a tratar de hacerlo.
Toda persona que establece objetivos específicos, metas claras, tiene un 90% de posibilidad de lograr lo que se propone.
A veces ocurre que muchos fracasos aparecen por no tener claro los objetivos. Por eso es importante ser específico en los objetivos.
Exactamente ¿qué querés ser? Un poquito de esto, un poquito de aquello, … ¿qué? Seguro que no te vas a recibir de lo que sea, porque no hay una especificación de objetivos. Y no tengo claridad de hacia dónde voy.
A veces los adolescentes que terminaron el colegio secundario, quieren empezar una carrera, pero no tienen claro que van a seguir y siguen algo pandereta. Van por un lado, después van por el otro lado y así. ¿Qué pasa? Obviamente, no terminan. Síndrome motivacional. No hay claridad en el objetivo. Hay mucha responsabilidad de los ancestros que no ayudaron, ni colaboraron para que eso ocurriera.
Hay que hacer un buen plan, por eso metas realistas, que nos lleven a ese éxito buscado. Hay mucha gente que dice, empiezo una carrera y en cuánto me recibo.
¿Cuál es tu objetivo? En ocho años recibirme, por ejemplo. Bueno bárbaro, es un plan.
O empiezan un emprendimiento y dicen, en tres días me hago millonario. Eso no es una meta realista. ¿qué va a pasar? Te vas a equivocar. Una meta realista es con análisis.
Me dijeron que poner un kiosco hoy es un negocio bárbaro. Te dijeron… y qué estudio hiciste para saber si eso es así? No, ninguno. Pero el que me dijo, el pibe sabe. Bueno, agarrate porque te vas a pegar el palo.
4.- Ambiente motivador.
El ambiente motivador te va a ayudar a motivarte.
El ambiente virtuoso, siempre va a ser un apoyo adicional en lo que vos hagas. Es importante conocer ese equipo de personas que te van a ayudar. Y si vos tenés un ambiente motivador, uno se ayuda al otro, se van ayudando todos. ¡Dale! ¡Se puede!
Es muy importante el ambiente motivador, la risa, la endorfina, la buena vibra. Porque la buena vibra se transmite. Si estás mal, no te juntes con gente que está mal. Juntate con gente que esté mejor que vos. Te suben, es normal. Ahora si ustedes van con una persona con tristeza y depresiva qué va a pasar? El Titanic. Todo funciona así.
Un ejemplo más genérico: nuestro país hermoso, donde tenemos un síndrome motivacional por excelencia. Por eso todo lo que va a venir. Porque más allá de las cosas que están ocurriendo en nuestro país, ya la gente no cree todo lo que va a pasar. Mejor dicho, si cree que va a pasar todo mal.
Entonces, es una sumatoria de eventos ante los errores, desmotivación.
Y también la gente así se enferma.
La realidad que una vez que uno consiguió todo eso, hay que celebrar las pequeñas victorias. Porque a veces, hay objetivo a largo plazo. Y que no se consiguen rápidamente, vamos a ser realistas. Cualquiera sea, desde el estudio, trabajo espiritual. Uno dice: yo ya quiero ser maestro ascendido y hacer milagros. Sí, hice el curso de milagros, tengo el diploma. Mirá que fácil, hacés el curso de milagros y ya hacés milagros… Entonces ante eso, no. Justamente, saber trabajar y celebrar cada victoria. Hacés una carrera de seis años, primer año terminé, vamos a brindar el primer año.
Yo celebro cada situación, brindemos por este éxito, por aquel éxito, son todas pequeñas victorias de crecimiento. Porque te recuperaste de una enfermedad.
Es importante celebrar cada pequeña victoria. Porque eso genera automotivación.
Ya saben aquellos que son papá, mamá, cómo tratar a sus niños, como tratar a sus ancestros. También a esta altura, algunos tienen abuelos, padres o tienen hijos.
A los hijos, recuerden muy bien el tema de la autoconfianza y la autoeficacia. No tratarlos de salamines, porque eso complica su autoconfianza y su autoeficacia. Y a los ancianos, tampoco.
Igualmente, como uno trata a los ancianos, van a tratar a los hijos y viceversa. No se olviden que esos padres que han tenido o tienen, hicieron su mejor esfuerzo.
No, pero son muy tóxicos. Bueno aléjate de la toxicidad, pero no los maltrates.
Tips para trabajar la automotivación.
1.- Determinemos metas claras.
Para ello, debés hacerte preguntas. Acá algunas preguntas orientativas:
a. ¿Sabés el motivo real de hacer lo que has venido haciendo hasta ahora diariamente?
b. ¿Qué querés alcanzar con las iniciativas que estás tomando día a día?
c. ¿Por qué querés alcanzar esos objetivos?
Si ninguna de estas preguntas tiene respuestas, estamos en problemas. Porque ahí es donde uno trabaja el tema del deseo, o te cuestionás si de verdad hay un deseo o un programa o mandato que está ejecutándose. Y ahí me conozco. Me doy cuenta que es un mandato y se trabaja.
Estas preguntas que estamos haciendo, nos van a ayudar a tener bien definidas nuestras metas. Porque ahí es donde, con esta pregunta, decís bueno ya entendí. Tengo claro que quiero y voy a saber dónde quiero ir. Porque quizás todo lo que quiero, no lo quiero hacer.
O por lo menos, voy a entender por qué lo estoy haciendo. No me queda más remedio, tengo que mantener la familia. Bueno, tenemos una respuesta.
Por eso, después te va a ser más fácil, cuando tenés claridad, tomar actitudes para llegar a la meta. Lo que es importante, y esto hay que tenerlo con mucha claridad, es conocer la capacidad de uno. Ejemplo: me encanta el baile clásico y no sé si tengo tanta capacidad para ser el mejor bailarín clásico. No me veo, no quiero decir que no puede ser. Si yo quiero ser el mejor bailarín clásico en esta etapa, me va a costar un poco.
Una persona que vivía o trabajaba en la construcción, de golpe decidió y vió como algo interesante el estudio del violín. Una persona de 30 años, dijo: cambio mi vida y me dedico al violín. Y ahí es donde uno empezó a trabajar el objetivo, de tener claridad, porque vos querés vivir del violín? Mirá, para vivir del violín vas a tener que estudiar 10 años, después de los 10 años vas a terminar aprendiendo el violín. Pero para vivir del violín, vas a tardar otros 10 años más, o sea que en 20 años vas a poder tener un ingreso claramente inferior al que estás teniendo ahora. Obviamente, después de todo este análisis, se dió cuenta que no podía vivir del violín y se sigue dedicando al rubro específico de la construcción. Siguió estudiando otra cosa, pero en un rubro referido a la construcción.
En este ejemplo que estoy dando, tiene que ver el tema de darse cuenta de ¿qué es lo que tengo, ¿cuál es mi capacidad? y después, tener claramente la visión correcta de la meta.
Me gustaría vivir de esto, pero para llegar a vivir de esto, va a pasar mucho tiempo y hoy es un problema. Eso no quiere decir que estudie violín como hobby. Pero no como parte importante para tu manutención. Ahí es donde uno trabajó un poquitito en ver la verdadera visión y es donde mi verdadera automotivación va en forma correcta.
Lo importante es convencerse de esos objetivos que uno tiene y esas capacidades. Tener claridad en eso. Si no, uno debe aceptar posiblemente, terminar en la mediocridad. Y ahí es donde uno habla de planes a corto, mediano y largo plazo.
Hay que planificar la meta enumerando las acciones. Y empezás con el primer tip para la automotivación.
No negar la realidad. Mucha gente niega la realidad. Mucha gente espera grandes cambios o grandes milagros de la nada. Si uno viene haciendo las cosas como las viene haciendo. ¿Por qué debería cambiar?
2.- Cambiar el foco de tu pensamiento.
Una de las maneras de automotivarse, es cambiar el foco del pensamiento.
¿Alguna vez uno percibió cómo estamos constantemente pensando en lo que los otros creen? Familiares, amigos, tíos, primos, abuelos… O incluso, suponemos lo que otras personas imaginan de uno. A veces uno está con ese pensamiento y dice: qué ven de mí? MAL.
Ese es el no pensamiento. No debe importarme lo que piense el otro.
Porque si yo vivo con ese pensamiento imaginario, hay muchas medidas que tomo. No porque me gusta, sino porque los que me van a ver, van a ver que estuve bien.
Hay muchas decisiones que tomamos, no porque nos gusta, sino porque creemos que son importantes para alguien. Y eso lamentablemente, es una de las grandes razones de la falta de ánimo. Porque no lo hice porque lo sentía, lo hice por el otro, para que el otro me vea y diga: ¡qué bien!
Te importa cómo te ven y perder el ser genuino.
Estamos hablando de cambiar el foco de pensamiento, que no es poca cosa. Debemos muy fuertemente, cuando las cosas no están ocurriendo como quisiera que ocurra, desenfocar el problema que, con el foco de pensamiento, uno se vuelve obstinado y quiere seguir haciendo lo mismo. Entonces cómo te vas a automotivar si vivís de frustración en frustración? Yo conozco personas que insisten. Si ya probaste 10 veces haciendo esto, por qué pensás que la 11ª va a salir? Si cambiás un poco el enfoque, quizás te salga eso que estás haciendo. Y lo más interesante es que siempre ocurre.
Fíjense cómo funciona la mente, que a veces hay personas que sienten la necesidad de tener hijos y están totalmente enfocados en ello. Pero el hijo no aparece, hasta que desenfocan la mente. Porque adoptó un niño u otra cosa. Automáticamente esa mujer quedó embarazada. ¿qué pasó? Desenfocó el pensamiento. Así funciona todo. Olvídate, desenfocá la mente.
Quiero, quiero, quiero. Basta, desenfocá la mente un ratito, descansá con la mente. Viví.
Hay gente que ha vivenciado cosas, se queda con la historia, y ahí no es motivadora. Porque me quedo pensando: si hubiera hecho esto, no hubiera pasado aquello. Ya está! Pasó! Vamos de acá en adelante. Desenfocá el pensamiento.
3.- Haz nuevas elecciones, siempre que sean necesarias.
Algunos cambios te impulsan para que te animes a hacer algo distinto. A veces, lo que estás viviendo es para salir de ese lugar, aunque no te guste, buscá un cambio. Porque a nosotros; y ahí está el tema de perder automotivación, lo nuevo y lo desconocido, nos genera incertidumbre, desconfianza, miedo. Entonces uno se queda con la historia. En una situación personal, laboral, te ves obligado a un cambio. Ej.: te despidieron. ¡Buenísimo! Es una nueva posibilidad, nuevos momentos, viene lo mejor, no te desesperes porque viene lo mejor.
A veces a nivel laboral, para estar calificado en una tarea o para conseguir un objetivo, se pierde toda la vida al cohete. Sin darte cuenta que era la oportunidad para justamente buscar otra cosa en la que quizás fueras un exitoso.
Lo voy a poner nivel comercial, donde a veces uno insiste sobre un nicho de negocio: Tengo que vender panchos en el puerto. Seguís, te volvés loco para vender panchos en el puerto. ¡Basta! No vas a vender panchos en el puerto. No se venden. Cambiá, hace una nueva elección.
A veces la gente genera cambios, creyendo que genera cambios y en realidad está haciendo lo mismo. Entonces si la auto efectividad va fallando, ya me desmotivo.
4.- No tengas miedo a equivocarte.
Cuando uno a veces desconfía de uno, tiene que mirar los buenos resultados que tuviste en tu vida. …
Mi vida es un fracaso. No, algo bien hiciste en tu vida. Reconstruyamos desde que estuviste bien.
La realidad es que los éxitos de la vida no dependen de la suerte, dependen de lo que hago.
Y la automotivación es tener muchas ganas de superarse y obviamente, correr riesgos. Pero los riesgos son todos calculados, analizados.
No hay que tener miedo a equivocarse, porque de los errores uno aprende. Errar es sano, persistir es enfermizo.
Uno aprende de los errores, pero no quedarse enganchado en un error. Es muy importante no castigarse cuando tenés un tropiezo, pero tampoco te quedes llorando al lado de la piedra que te hizo tropezar. Hay gente que pasa años al lado de la piedra. Hasta se enamoran de ella.
5.- Aprender algo nuevo día a día.
La voluntad y la iniciativa son características esenciales de toda automotivación y algo nuevo te motiva. Hay que animarse a lo nuevo. Aunque sea un hobby. Hay gente que dice: Llegué a una edad en la que no quiero hacer más nada! ¡No, aprendé algo nuevo! Nunca es tarde, aunque sea un hobby. Nuestro cerebro funciona de la siguiente manera, cuanto más información y conocimiento, mayor autosatisfacción tengo. Y si lo miramos desde el emprendimiento de algo que yo voy a hacer en mi vida: Tengo que tener un análisis concreto y muy buena información antes de emprender, porque me va a dar una autoconfianza y me voy a animar a hacerlo.
El gran problema de la frustración de mucha gente es que no hacen todo un análisis completo. Es muy importante justamente, aprender porque vos vas a confiar en tu conocimiento y vas a sentirte fuerte ante eso.
6.- Sé positivo.
Buenos pensamientos generan buenos resultados. SIEMPRE. Qué es un buen pensamiento?
Si yo digo: me va bien, pero en realidad dentro mío digo: esto es un desastre. Hay gente que está así. Me va bien y después es un desastre.
No es que dije tres me va bien y entonces me va bien. No es así, hay que sentirlo.
7.- Liberate de las ideas autodestructivas.
Porque te aíslan. Una idea autodestructiva te aisló. Y después viene la sobrecarga de pensamientos negativos, que te desaniman y después se esparcen. La persona negativa te tira toda esa negatividad. Tiene tanto que derrapa. Negativo, no tiene más lugar, te lo tira a vos.
Yo tengo una familia tóxica, olvídate tiene tanto negativo que te lo va a tirar. La familia tóxica vive en la negatividad.
El pensamiento positivo, no es siempre pienso en positivo. Es un ejercicio. Es cuando entró algo negativo, voló. Es saber regular ese momento. Andate pensamiento negativo.
Al pensamiento positivo debés tenerlo dentro de tu mente, reconocerte en serio y ver cuáles son los puntos fuertes que tenés, ver que podés y sentirlo. No repetirlo como un lorito. Saber que uno consigue las cosas y ver las cosas que uno pudo conseguir en su vida.
La realidad, que para ser positivo hay que trabajar todo eso y a uno le enseñan, acorde a su vinculación familiar inicial, el pensamiento no positivo.
Generalmente de familias de pensamiento negativo, vienen estructuras de pensamiento negativo.
Todo es negativo, te enseñan a pensar de forma negativa. Es una manera de vivir. Te enseñan a desconfiar, a tener pensamiento negativo; y eso te lleva a no tener motivación y a sentirte que estás en pérdida. Aunque te vaya bien, sentís que estás en pérdida. Uno debe creer en sus capacidades.
Se ven virtuosos o se sienten el último orejón del tarro.
8.- Invertí en fuentes de satisfacción diferentes.
Hacer algo distinto que te haga sentir bien, que te sirva, que te estimule. Puede ser desde tu vida profesional, laboral, lo que sea. Pero algo que te estimule. O sino, que no tenga nada que ver con lo que es tu profesionalidad. Escuchar música estimulante, leer un libro, ver películas divertidas (no mires dramas), hacer deporte, meditar, reunirse con amistades virtuosas. No, reunirse con amistades que viven tragedias romanas o con visiones nefastas. Basta de tragedias, nos reunimos para divertirnos.
La realidad que para la automotivación, lo que estamos viendo ahora es una técnica de coaching.
9.- Utilizar alguna herramienta de coach.
El coaching va a analizar, observar e impulsar tu virtud. Más allá de la terapia que tengas que hacer o no. Pero sí, ver cuáles son tus cualidades y cómo alinearse a eso. Sino, no sirve tampoco.
10.- Tratá de conocer a personas exitosas.
Y esto es así, porque es vibración. Lo voy a poner en el ámbito laboral y también en el ámbito espiritual. Estamos hablando de automotivación. Tratá de conocer a personas exitosas. El éxito trae al éxito, el fracaso trae al fracaso. Siempre es así, una vez que vos empezaste a tener esa autorrealización, esa automotivación y empezaste a ser una persona exitosa, también ayudá a aquel que no lo es. Pero ya sos máquina, no vagón.
Entonces ayudá, eso también te va a potenciar. Pero al principio, cuando estás por arrancar, empezá a conectarte con gente virtuosa en todos los sentidos, porque te van a llevar al mismo lugar.
Entiendo el éxito como llegar a esas metas espirituales. Conectate con gente que realmente tiene un trabajo espiritual, porque esos te van a impulsar al trabajo espiritual. No aquel que ve al trabajo espiritual como una bengala; o que ve un paseo espiritual.
Mirá al coherente, al que está comprometido, y ahí pum para arriba. Más allá de que esa persona exitosa en el rubro que esté, te va a impulsar. Obviamente que después va a depender de vos, pero ahí tenés un buen impulso. Porque por lo menos vas a escuchar cómo lo está haciendo, qué está haciendo, cómo trabaja.
Es muy importante esto de la virtuosidad, personas con pensamiento positivo van a estar dispuestos a ayudarte, porque son positivos. Si vos estás con una persona virtuosa, con pensamiento positivo, seguro te va a dar una mano y pum arrancaste y seguís. Y después, seguramente, vos siendo positivo vas a dar una mano a aquel que no lo es.
En cambio, la persona de pensamiento negativo, muy difícil que te quiera dar una mano.
11.- Sal de tu zona de confort.
Hay gente que está acostumbrada a las cosas y sigue haciendo lo mismo. Basta, perdé el miedo. Salí. Hay muchos desafíos. Tengo miedo, ese es el tema. Estás cómodo, aunque estés sufriendo, está mal. Sí salís de tu zona de confort, te vas a sentir emponderado, vas a sentir que vos podés, que no es poca cosa.
Un ejemplo: Supongamos que el objetivo principal es hablar bien el inglés y tu mayor dificultad es tener vergüenza de hablar con las personas. Aunque no sea fácil, tenés que comenzar a tomar actitud y para perder ese miedo, empezá a estar con la gente y hablar inglés, aunque te equivoques.
Perder el miedo a equivocarse es muy importante para la automotivación y reirte de los errores.
12.- Arrancar bien el día.
Parece obvio, pero no lo es, no mucha gente arranca bien el día. Por ejemplo: Voy a prender el auto y no me arranca porque no tengo batería. No importa, reíte. Te quedaste sin combustible, reíte.
Me levanto a la mañana y digo qué tormenta y tengo que ir a trabajar. ¡Que frío que hace! Llueve, hace terrible frío, tomá un rico desayuno y decí: que linda tormenta, va a haber un poquito de agua y creo que me voy a mojar un poquitito; y salgo y me divierto y veo qué pasa. Todo eso te va a dar buena energía para tu salida; y salís con buena vibra.
13.- Mimarme.
Date algunos premios, chiquitos, lo que uno pueda. Esas son las pequeñas metas y los pequeños objetivos.
Claro, todo esto que estamos hablando es muy lindo, muy fuerte para levantar esa situación amotivacional que uno tiene. El síndrome motivacional te lleva a los peores lugares, no es depresión, pero puede llevarte a la depresión. Es ahí que es importante aplicar todo esto, porque uno ya aprendió a no estar motivado.
Y uno podría decir: todo lo que vos me decís, está bueno. Pero ¿cómo puedo motivarme si estoy en Argentina, que económicamente no está bien, no tengo la vacuna, tenemos un desborde sanitario, no se entiende por dónde vamos ni hacia dónde vamos? ¿Cómo me puedo animar?
Si, te podés animar, todo es un tema de visión. Y ahí es donde uno debe proyectarse en positivo. O sea, mirar las cosas desde otro lugar.
Lo importante es que más allá de lo que esté pasando alrededor, cuando yo esté bien conmigo, seguramente solucione los problemas, y todos esos factores que me pueden generar un tipo de desánimo van quedando atrás.
Uno también podría decir: tengo mucho miedo, me cuesta mucho en esta incertidumbre país arriesgarme a algo. Hay que comprender que la automotivación es una vibración, las cosas se van acomodando. Siempre hay soluciones, siempre hay salidas. Siempre que llovió, paró, esto funciona así. Si yo estoy vibrando bien, hago que el cosmos vibre bien.
Yo soy una vibración, por eso la automotivación es importante. Y como yo vibro, hago que vibre. Y ahí volvemos a todo lo que hablamos recién, si yo estoy vibrando mal, hago que lo que me rodea vibre mal.
Si hay un grupo de gente que vibra mal, yo voy a vibrar mal. Cuando uno rompe el círculo de lo negativo y empieza a trabajar la virtuosidad, todo aparece y en lo menos pensado aparece. Cuando uno corta algunos círculos, y dice, mirá estaba trabado y se solucionó. Decía que tenía un pensamiento mediocre. Si, se fue y fluyó todo.
A veces, uno no entiende cómo funcionan las cosas, hay que dejar fluir hasta que después viene el aprendizaje. Hay gente que te tira la mala. Rajá. Andate.
Si yo estoy automotivado es una frecuencia, aprendan a estar con gente de buena vibra. La gente de buena vibra, va a darles ese impulso necesario para que ustedes salten en lo que quieran emprender.
Claramente que una buena automotivación, arranca cuando uno tiene un verdadero trabajo espiritual. Porque a la vida la ve desde otro lugar, entonces fácilmente uno va a lograr llegar a esos objetivos que uno quiere y necesita. Si uno tiene un buen trabajo espiritual, todo lo demás viene por añadidura, por ahí pasan las cosas.
A veces ocurre, y ahí está la confusión y es donde uno tiene que estar alerta, en el universo cuando a uno le empieza a ir bien, cuando estás automotivado, te empezás a sentir bien; y empieza a irte bien en lo que es este plano y de golpe te confundís, y empezás a hacer cosas del plano material, sabiendo que arrancaste por plano espiritual para que pegues este salto. ¿Qué es lo que pasa? Es fácil, hay que esperar para ver cómo te pegas el palo. Porque siempre es al revés. Y eso es vibración. Y por ahí va el tema de automotivación.
Les quiero decir que se cuiden. Un buen trabajo espiritual, es aquel que tiene una buena visión. No hay que bajonear, pero sí estar en alerta con todas las cosas que van ocurriendo con respecto a la salud.
Taller: "Automotivación en tiempos de pandemia"
Sábado 15 de Mayo 2021
A cargo del Profesor Claudio M.
Ahora, ¿por qué la motivación es importante para esta etapa? Porque cuando uno ve todo eso se pregunta ¿de qué me voy a motivar? Me escondo y se acabó. Ahí es donde hay que trabajar la automotivación. Y es importante trabajarla, porque no estar motivados y tener estrés, nos va a generar una situación no conveniente para el cuerpo físico.
Entonces lo primero que tenemos que comprender es que existe muy silenciosamente, un síndrome que se llama síndrome motivacional, también conocido como amotivacional, sin motivación.
Este síndrome que es oculto, tiene muchas similitudes con la depresión, sin llegar a serlo. Vamos a dar las características, porque quizás uno esté circulando o caminando por el síndrome motivacional y no se dió cuenta. Son sensaciones que tienen que ver con nuestro ser interno. Esas características en realidad van a ser los síntomas. Porque el síndrome motivacional, primero nos genera una sintomatología psicológica, para luego ir al plano físico.
¿Cuáles son las características o los síntomas del síndrome motivacional o amotivacional?
1.- La apatía
Es un desinterés permanente. Se siente desmotivado con respecto a la vida y nada te llama la atención, ni hace que te sientas con ganas de hacer cosas o hasta de caminar. Uno dice no quiero caminar, mejor me quedo en casa.
2.- Sin planes futuros
Carecés de objetivos vitales. Aparece desinterés, no aparecen los planes futuros. El futuro mucho no te preocupa. Y no solo el futuro sino también las proyecciones laborales o la vida, o las amistades.
3.- La pasividad
Pasividad es no estar en paz. La pasividad es estar ante el entorno sin ningún estímulo que me llame. O sea, en el momento que tengo que hacer alguna actividad solo acompaño.
4.- El conformismo
Ejemplos de conformismo: Te tiran un hueso, bueno está bien… Estoy hace 100 años en un trabajo. Es una falta de objetivo vital y empieza a fallar el desarrollo personal, uno se queda y aparece la zona de confort.
5.- Pérdida de principios o pérdida de ideales
Se pierde el sentido de la vida, porque cada uno tiene un sentido de algo y lo pierde. Se desgana y lo va perdiendo. Pierde ese brillo interno.
6.- Pérdida de emociones
Van a ver que muchas características se entrelazan. No se experimenta esa sensación de decir: ¡qué lindo!, ¡qué bueno! Todos esos sentimientos van construyendo al ser.
7.- El aislamiento
Una persona no quiere tener contacto con otra, eso sería el aislamiento. Es eso que decís, no bueno mejor me quedo. O te aíslan, porque ya no encajo, o justamente, voy por otro camino.
8.- La introversión
Toda esa capacidad de atención externa se va minimizando; y estoy muy adentro. En mis pensamientos.
9.- La tristeza
Uno no identifica el motivo, pero está triste. Uno vive nostálgico y cada vez se siente más fuerte. Y eso me genera una gran tristeza.
10.- La falta del afecto
Ya no tenés lazos con los individuos de tu entorno, por un motivo u otro.
11.- El deterioro de las habilidades sociales
Justamente, te cuesta relacionarte con otros y no sabés cómo relacionarte con otros. Te sentís perdido, no me relaciono, me aíslo.
12.- Disminución en la concentración
Ahí empieza el deterioro cognitivo. La memoria empieza a infectarse también.
13.- Lentitud de movimientos y disminución de reflejos
Comenzás a ser más lento y con menos reflejos.
14.- Abandono del cuidado personal
Aunque parezca mentira, este síndrome es muy estudiado porque en paralelismo, todas estas características las tienen las personas que consumen cannabis. Más aún, hay todo un estudio muy profundo con este síndrome motivacional, cuando vos tenés una persona consumidora de cannabis, si el cannabis lo llevo a hacer todo eso. Porque eso ocurre después o eso lo llevó al cannabis. Hay toda una situación muy profunda de estudio. Esto lo doy como asterisco para aquellas personas que vivencian o tienen familiares, que entiendan que es muy factible que hayan tenido un síndrome motivacional que los haya llevado al cannabis. Pero el cannabis después genera un síndrome motivacional mucho más fuerte. Es un círculo vicioso.
Es ahí donde se trabaja fuertemente este tema de adicción.
¿Cómo salgo de todo esto?
Primero, reconociendo toda esta sintomatología, que no es poca cosa. Uno lo puede trabajar y es muy importante el tema de la motivación, porque a veces no le prestamos una correcta atención. Pero uno debe pensar que la motivación en realidad, está presente en las funciones básicas de la vida. Como el acto de comer, por ejemplo, en donde la motivación es: tengo hambre y voy a comer. O la educación o cultivarse por el deseo al conocimiento, son los basales.
Pero cuando la automotivación falla, los basales también son influenciados. La motivación humana hace que el humano sea quien es. Esa pulsión de vida, también es motivación.
La realidad que estar amotivado o desmotivado, te lleva a que uno no pueda desarrollar sus habilidades internas y crecer. Y ahí es donde uno comienza también, ese circulo destructivo.
Es ahí que cuando realmente tiene automotivación, tiene una habilidad muy importante en sus manos y yo diría, la gran habilidad. Las personas automotivadas, son las que llegan y las que salen de la mediocridad, los que nunca abandonan. Los que no poseen automotivación, son los que nunca pueden alcanzar eso que buscan. Y la realidad que, para evadir, va a utilizar cualquier método, cualquier excusa.
Nosotros a lo largo de la vida, enfrentamos, confrontamos, vivimos situaciones vitales complicadas. No hay nadie que tenga la vida tan simple. Siempre una media o pequeña o gran complicación aparece. Y la automotivación es la fuerza, por eso es importante tenerla, te va a impulsar a superar la complicación.
Tal es así que es la clave para alcanzar todos los objetivos. Que, a lo último, te va a llevar a eso que busca todo ser humano, la felicidad.
La automotivación está relacionada con lo que mucho tiempo hablamos y seguiremos hablando, que es la inteligencia emocional, es una habilidad de la inteligencia emocional, es una herramienta.
¿Cuáles estrategias podemos utilizar para la automotivación y qué herramientas?
Para construir niveles altos de automotivación, necesitamos ciertos factores que hay que cultivar en la persona, ahí es donde se hace el trabajo interno, terapia, o lo que sea.
Factores a trabajar para construir niveles altos de automotivación.
1.- La autoconfianza.
Confianza en uno mismo. Y ¿cómo puedo trabajar la confianza si me siento un mediocre?
Primero debés tener un núcleo que te genere confianza en vos. Que no vea en vos el último orejón del tarro, que hacés todo mal, que no servís para nada, etc. Porque como no está en vos, tiene que venir de alguna manera. Justamente, la autoconfianza es vital en todo esto. Cuando está golpeada, lamentablemente viene por nuestros ancestros (papá, mamá, abuelos) de manera inconsciente. No porque había un plan macabro de autodestrucción. Pero sin querer lo han hecho desde: “Correte que mejor lo hago yo”. O un niño hace algo y se le dice “podés hacerlo mejor, esto está mal”. Así se va minando la autoconfianza.
La autoconfianza la minás con los premios y castigos. O mostrándote marcadores de diferencia. Ves un niño que tiene un poquito de kilos y le decís gordito. “Vos no naciste para el deporte, correte”. “Sos medio inútil”. “Si no fuera por mí, vos no existís. ¿Qué hacés con eso?”
Todo eso mina la autoconfianza; y no hay autoconfianza. Trabajarlo en terapia es medio difícil.
Entonces necesitás un círculo virtuoso que te genere autoconfianza.
Para seguir trabajando la autoconfianza, una vez que te estimulan, aparece la autoeficacia. Me doy cuenta que lo pude hacer, me doy cuenta que lo hice.
Ahí es donde también hay un doble juego con los niños, que vos le generás autoconfianza, cuando le estás mostrando que tienen autoeficacia. Ej.: hicieron bien algo y vos le decís: ¡qué bien! Entonces la confianza crece.
Miren un error grave sin querer de los ancestros: Un niño lleva un plato o una copa a la mesa y se le rompe. Y a veces, hay padres que lo insultan. Gravísimo. Le minaste su autoeficacia. Papá me dijo que soy un idiota, que tengo manos de manteca.
Sucede al revés también. Cuando están con sus padres, sus madres o abuelos, que ya están en esa etapa de ocaso, como todos lo vamos a tener. Se van ocultando de a poquito, vamos a llegar a los 100 años y vamos a dejar el cuerpo. Es muy importante que el anciano sienta que es auto eficaz, para que tenga autoconfianza. Pero en estas culturas occidentales, ocurre todo lo contrario, los hacés sentir como molestos, estorbos y torpes. No va por ahí.
Para arriba y para abajo.
¿Si hace algo que es incorrecto? Hay muchas maneras de hablarlo. Pero no de hacerlos sentir torpes, molestos y tontos. Todo lo contrario.
Igual es la cultura de occidente en donde no hay tanto respeto ancestral. Por eso estamos hablando de este tema.
2.- Pensamiento positivo.
Es muy importante mirar todas las cosas de forma positiva. Sobre todo, cuando las cosas no salen. Nuestros pensamientos siempre influyen en nuestros éxitos o fracasos.
Se ha estudiado que justamente la clave para estar motivado es ser optimista. El optimista es aquel que tiene pensamiento positivo. ¿cómo están con el pensamiento positivo? ¿son optimistas?
3.- Metas realistas.
Tener objetivos claros, concretos. O sea, ir hacia una dirección. No que el viento me lleva por acá, por allá, no sé… Todo tiene que ser un reto. Voy a tratar de hacerlo.
Toda persona que establece objetivos específicos, metas claras, tiene un 90% de posibilidad de lograr lo que se propone.
A veces ocurre que muchos fracasos aparecen por no tener claro los objetivos. Por eso es importante ser específico en los objetivos.
Exactamente ¿qué querés ser? Un poquito de esto, un poquito de aquello, … ¿qué? Seguro que no te vas a recibir de lo que sea, porque no hay una especificación de objetivos. Y no tengo claridad de hacia dónde voy.
A veces los adolescentes que terminaron el colegio secundario, quieren empezar una carrera, pero no tienen claro que van a seguir y siguen algo pandereta. Van por un lado, después van por el otro lado y así. ¿Qué pasa? Obviamente, no terminan. Síndrome motivacional. No hay claridad en el objetivo. Hay mucha responsabilidad de los ancestros que no ayudaron, ni colaboraron para que eso ocurriera.
Hay que hacer un buen plan, por eso metas realistas, que nos lleven a ese éxito buscado. Hay mucha gente que dice, empiezo una carrera y en cuánto me recibo.
¿Cuál es tu objetivo? En ocho años recibirme, por ejemplo. Bueno bárbaro, es un plan.
O empiezan un emprendimiento y dicen, en tres días me hago millonario. Eso no es una meta realista. ¿qué va a pasar? Te vas a equivocar. Una meta realista es con análisis.
Me dijeron que poner un kiosco hoy es un negocio bárbaro. Te dijeron… y qué estudio hiciste para saber si eso es así? No, ninguno. Pero el que me dijo, el pibe sabe. Bueno, agarrate porque te vas a pegar el palo.
4.- Ambiente motivador.
El ambiente motivador te va a ayudar a motivarte.
El ambiente virtuoso, siempre va a ser un apoyo adicional en lo que vos hagas. Es importante conocer ese equipo de personas que te van a ayudar. Y si vos tenés un ambiente motivador, uno se ayuda al otro, se van ayudando todos. ¡Dale! ¡Se puede!
Es muy importante el ambiente motivador, la risa, la endorfina, la buena vibra. Porque la buena vibra se transmite. Si estás mal, no te juntes con gente que está mal. Juntate con gente que esté mejor que vos. Te suben, es normal. Ahora si ustedes van con una persona con tristeza y depresiva qué va a pasar? El Titanic. Todo funciona así.
Un ejemplo más genérico: nuestro país hermoso, donde tenemos un síndrome motivacional por excelencia. Por eso todo lo que va a venir. Porque más allá de las cosas que están ocurriendo en nuestro país, ya la gente no cree todo lo que va a pasar. Mejor dicho, si cree que va a pasar todo mal.
Entonces, es una sumatoria de eventos ante los errores, desmotivación.
Y también la gente así se enferma.
La realidad que una vez que uno consiguió todo eso, hay que celebrar las pequeñas victorias. Porque a veces, hay objetivo a largo plazo. Y que no se consiguen rápidamente, vamos a ser realistas. Cualquiera sea, desde el estudio, trabajo espiritual. Uno dice: yo ya quiero ser maestro ascendido y hacer milagros. Sí, hice el curso de milagros, tengo el diploma. Mirá que fácil, hacés el curso de milagros y ya hacés milagros… Entonces ante eso, no. Justamente, saber trabajar y celebrar cada victoria. Hacés una carrera de seis años, primer año terminé, vamos a brindar el primer año.
Yo celebro cada situación, brindemos por este éxito, por aquel éxito, son todas pequeñas victorias de crecimiento. Porque te recuperaste de una enfermedad.
Es importante celebrar cada pequeña victoria. Porque eso genera automotivación.
Ya saben aquellos que son papá, mamá, cómo tratar a sus niños, como tratar a sus ancestros. También a esta altura, algunos tienen abuelos, padres o tienen hijos.
A los hijos, recuerden muy bien el tema de la autoconfianza y la autoeficacia. No tratarlos de salamines, porque eso complica su autoconfianza y su autoeficacia. Y a los ancianos, tampoco.
Igualmente, como uno trata a los ancianos, van a tratar a los hijos y viceversa. No se olviden que esos padres que han tenido o tienen, hicieron su mejor esfuerzo.
No, pero son muy tóxicos. Bueno aléjate de la toxicidad, pero no los maltrates.
Tips para trabajar la automotivación.
1.- Determinemos metas claras.
Para ello, debés hacerte preguntas. Acá algunas preguntas orientativas:
a. ¿Sabés el motivo real de hacer lo que has venido haciendo hasta ahora diariamente?
b. ¿Qué querés alcanzar con las iniciativas que estás tomando día a día?
c. ¿Por qué querés alcanzar esos objetivos?
Si ninguna de estas preguntas tiene respuestas, estamos en problemas. Porque ahí es donde uno trabaja el tema del deseo, o te cuestionás si de verdad hay un deseo o un programa o mandato que está ejecutándose. Y ahí me conozco. Me doy cuenta que es un mandato y se trabaja.
Estas preguntas que estamos haciendo, nos van a ayudar a tener bien definidas nuestras metas. Porque ahí es donde, con esta pregunta, decís bueno ya entendí. Tengo claro que quiero y voy a saber dónde quiero ir. Porque quizás todo lo que quiero, no lo quiero hacer.
O por lo menos, voy a entender por qué lo estoy haciendo. No me queda más remedio, tengo que mantener la familia. Bueno, tenemos una respuesta.
Por eso, después te va a ser más fácil, cuando tenés claridad, tomar actitudes para llegar a la meta. Lo que es importante, y esto hay que tenerlo con mucha claridad, es conocer la capacidad de uno. Ejemplo: me encanta el baile clásico y no sé si tengo tanta capacidad para ser el mejor bailarín clásico. No me veo, no quiero decir que no puede ser. Si yo quiero ser el mejor bailarín clásico en esta etapa, me va a costar un poco.
Una persona que vivía o trabajaba en la construcción, de golpe decidió y vió como algo interesante el estudio del violín. Una persona de 30 años, dijo: cambio mi vida y me dedico al violín. Y ahí es donde uno empezó a trabajar el objetivo, de tener claridad, porque vos querés vivir del violín? Mirá, para vivir del violín vas a tener que estudiar 10 años, después de los 10 años vas a terminar aprendiendo el violín. Pero para vivir del violín, vas a tardar otros 10 años más, o sea que en 20 años vas a poder tener un ingreso claramente inferior al que estás teniendo ahora. Obviamente, después de todo este análisis, se dió cuenta que no podía vivir del violín y se sigue dedicando al rubro específico de la construcción. Siguió estudiando otra cosa, pero en un rubro referido a la construcción.
En este ejemplo que estoy dando, tiene que ver el tema de darse cuenta de ¿qué es lo que tengo, ¿cuál es mi capacidad? y después, tener claramente la visión correcta de la meta.
Me gustaría vivir de esto, pero para llegar a vivir de esto, va a pasar mucho tiempo y hoy es un problema. Eso no quiere decir que estudie violín como hobby. Pero no como parte importante para tu manutención. Ahí es donde uno trabajó un poquitito en ver la verdadera visión y es donde mi verdadera automotivación va en forma correcta.
Lo importante es convencerse de esos objetivos que uno tiene y esas capacidades. Tener claridad en eso. Si no, uno debe aceptar posiblemente, terminar en la mediocridad. Y ahí es donde uno habla de planes a corto, mediano y largo plazo.
Hay que planificar la meta enumerando las acciones. Y empezás con el primer tip para la automotivación.
No negar la realidad. Mucha gente niega la realidad. Mucha gente espera grandes cambios o grandes milagros de la nada. Si uno viene haciendo las cosas como las viene haciendo. ¿Por qué debería cambiar?
2.- Cambiar el foco de tu pensamiento.
Una de las maneras de automotivarse, es cambiar el foco del pensamiento.
¿Alguna vez uno percibió cómo estamos constantemente pensando en lo que los otros creen? Familiares, amigos, tíos, primos, abuelos… O incluso, suponemos lo que otras personas imaginan de uno. A veces uno está con ese pensamiento y dice: qué ven de mí? MAL.
Ese es el no pensamiento. No debe importarme lo que piense el otro.
Porque si yo vivo con ese pensamiento imaginario, hay muchas medidas que tomo. No porque me gusta, sino porque los que me van a ver, van a ver que estuve bien.
Hay muchas decisiones que tomamos, no porque nos gusta, sino porque creemos que son importantes para alguien. Y eso lamentablemente, es una de las grandes razones de la falta de ánimo. Porque no lo hice porque lo sentía, lo hice por el otro, para que el otro me vea y diga: ¡qué bien!
Te importa cómo te ven y perder el ser genuino.
Estamos hablando de cambiar el foco de pensamiento, que no es poca cosa. Debemos muy fuertemente, cuando las cosas no están ocurriendo como quisiera que ocurra, desenfocar el problema que, con el foco de pensamiento, uno se vuelve obstinado y quiere seguir haciendo lo mismo. Entonces cómo te vas a automotivar si vivís de frustración en frustración? Yo conozco personas que insisten. Si ya probaste 10 veces haciendo esto, por qué pensás que la 11ª va a salir? Si cambiás un poco el enfoque, quizás te salga eso que estás haciendo. Y lo más interesante es que siempre ocurre.
Fíjense cómo funciona la mente, que a veces hay personas que sienten la necesidad de tener hijos y están totalmente enfocados en ello. Pero el hijo no aparece, hasta que desenfocan la mente. Porque adoptó un niño u otra cosa. Automáticamente esa mujer quedó embarazada. ¿qué pasó? Desenfocó el pensamiento. Así funciona todo. Olvídate, desenfocá la mente.
Quiero, quiero, quiero. Basta, desenfocá la mente un ratito, descansá con la mente. Viví.
Hay gente que ha vivenciado cosas, se queda con la historia, y ahí no es motivadora. Porque me quedo pensando: si hubiera hecho esto, no hubiera pasado aquello. Ya está! Pasó! Vamos de acá en adelante. Desenfocá el pensamiento.
3.- Haz nuevas elecciones, siempre que sean necesarias.
Algunos cambios te impulsan para que te animes a hacer algo distinto. A veces, lo que estás viviendo es para salir de ese lugar, aunque no te guste, buscá un cambio. Porque a nosotros; y ahí está el tema de perder automotivación, lo nuevo y lo desconocido, nos genera incertidumbre, desconfianza, miedo. Entonces uno se queda con la historia. En una situación personal, laboral, te ves obligado a un cambio. Ej.: te despidieron. ¡Buenísimo! Es una nueva posibilidad, nuevos momentos, viene lo mejor, no te desesperes porque viene lo mejor.
A veces a nivel laboral, para estar calificado en una tarea o para conseguir un objetivo, se pierde toda la vida al cohete. Sin darte cuenta que era la oportunidad para justamente buscar otra cosa en la que quizás fueras un exitoso.
Lo voy a poner nivel comercial, donde a veces uno insiste sobre un nicho de negocio: Tengo que vender panchos en el puerto. Seguís, te volvés loco para vender panchos en el puerto. ¡Basta! No vas a vender panchos en el puerto. No se venden. Cambiá, hace una nueva elección.
A veces la gente genera cambios, creyendo que genera cambios y en realidad está haciendo lo mismo. Entonces si la auto efectividad va fallando, ya me desmotivo.
4.- No tengas miedo a equivocarte.
Cuando uno a veces desconfía de uno, tiene que mirar los buenos resultados que tuviste en tu vida. …
Mi vida es un fracaso. No, algo bien hiciste en tu vida. Reconstruyamos desde que estuviste bien.
La realidad es que los éxitos de la vida no dependen de la suerte, dependen de lo que hago.
Y la automotivación es tener muchas ganas de superarse y obviamente, correr riesgos. Pero los riesgos son todos calculados, analizados.
No hay que tener miedo a equivocarse, porque de los errores uno aprende. Errar es sano, persistir es enfermizo.
Uno aprende de los errores, pero no quedarse enganchado en un error. Es muy importante no castigarse cuando tenés un tropiezo, pero tampoco te quedes llorando al lado de la piedra que te hizo tropezar. Hay gente que pasa años al lado de la piedra. Hasta se enamoran de ella.
5.- Aprender algo nuevo día a día.
La voluntad y la iniciativa son características esenciales de toda automotivación y algo nuevo te motiva. Hay que animarse a lo nuevo. Aunque sea un hobby. Hay gente que dice: Llegué a una edad en la que no quiero hacer más nada! ¡No, aprendé algo nuevo! Nunca es tarde, aunque sea un hobby. Nuestro cerebro funciona de la siguiente manera, cuanto más información y conocimiento, mayor autosatisfacción tengo. Y si lo miramos desde el emprendimiento de algo que yo voy a hacer en mi vida: Tengo que tener un análisis concreto y muy buena información antes de emprender, porque me va a dar una autoconfianza y me voy a animar a hacerlo.
El gran problema de la frustración de mucha gente es que no hacen todo un análisis completo. Es muy importante justamente, aprender porque vos vas a confiar en tu conocimiento y vas a sentirte fuerte ante eso.
6.- Sé positivo.
Buenos pensamientos generan buenos resultados. SIEMPRE. Qué es un buen pensamiento?
Si yo digo: me va bien, pero en realidad dentro mío digo: esto es un desastre. Hay gente que está así. Me va bien y después es un desastre.
No es que dije tres me va bien y entonces me va bien. No es así, hay que sentirlo.
7.- Liberate de las ideas autodestructivas.
Porque te aíslan. Una idea autodestructiva te aisló. Y después viene la sobrecarga de pensamientos negativos, que te desaniman y después se esparcen. La persona negativa te tira toda esa negatividad. Tiene tanto que derrapa. Negativo, no tiene más lugar, te lo tira a vos.
Yo tengo una familia tóxica, olvídate tiene tanto negativo que te lo va a tirar. La familia tóxica vive en la negatividad.
El pensamiento positivo, no es siempre pienso en positivo. Es un ejercicio. Es cuando entró algo negativo, voló. Es saber regular ese momento. Andate pensamiento negativo.
Al pensamiento positivo debés tenerlo dentro de tu mente, reconocerte en serio y ver cuáles son los puntos fuertes que tenés, ver que podés y sentirlo. No repetirlo como un lorito. Saber que uno consigue las cosas y ver las cosas que uno pudo conseguir en su vida.
La realidad, que para ser positivo hay que trabajar todo eso y a uno le enseñan, acorde a su vinculación familiar inicial, el pensamiento no positivo.
Generalmente de familias de pensamiento negativo, vienen estructuras de pensamiento negativo.
Todo es negativo, te enseñan a pensar de forma negativa. Es una manera de vivir. Te enseñan a desconfiar, a tener pensamiento negativo; y eso te lleva a no tener motivación y a sentirte que estás en pérdida. Aunque te vaya bien, sentís que estás en pérdida. Uno debe creer en sus capacidades.
Se ven virtuosos o se sienten el último orejón del tarro.
8.- Invertí en fuentes de satisfacción diferentes.
Hacer algo distinto que te haga sentir bien, que te sirva, que te estimule. Puede ser desde tu vida profesional, laboral, lo que sea. Pero algo que te estimule. O sino, que no tenga nada que ver con lo que es tu profesionalidad. Escuchar música estimulante, leer un libro, ver películas divertidas (no mires dramas), hacer deporte, meditar, reunirse con amistades virtuosas. No, reunirse con amistades que viven tragedias romanas o con visiones nefastas. Basta de tragedias, nos reunimos para divertirnos.
La realidad que para la automotivación, lo que estamos viendo ahora es una técnica de coaching.
9.- Utilizar alguna herramienta de coach.
El coaching va a analizar, observar e impulsar tu virtud. Más allá de la terapia que tengas que hacer o no. Pero sí, ver cuáles son tus cualidades y cómo alinearse a eso. Sino, no sirve tampoco.
10.- Tratá de conocer a personas exitosas.
Y esto es así, porque es vibración. Lo voy a poner en el ámbito laboral y también en el ámbito espiritual. Estamos hablando de automotivación. Tratá de conocer a personas exitosas. El éxito trae al éxito, el fracaso trae al fracaso. Siempre es así, una vez que vos empezaste a tener esa autorrealización, esa automotivación y empezaste a ser una persona exitosa, también ayudá a aquel que no lo es. Pero ya sos máquina, no vagón.
Entonces ayudá, eso también te va a potenciar. Pero al principio, cuando estás por arrancar, empezá a conectarte con gente virtuosa en todos los sentidos, porque te van a llevar al mismo lugar.
Entiendo el éxito como llegar a esas metas espirituales. Conectate con gente que realmente tiene un trabajo espiritual, porque esos te van a impulsar al trabajo espiritual. No aquel que ve al trabajo espiritual como una bengala; o que ve un paseo espiritual.
Mirá al coherente, al que está comprometido, y ahí pum para arriba. Más allá de que esa persona exitosa en el rubro que esté, te va a impulsar. Obviamente que después va a depender de vos, pero ahí tenés un buen impulso. Porque por lo menos vas a escuchar cómo lo está haciendo, qué está haciendo, cómo trabaja.
Es muy importante esto de la virtuosidad, personas con pensamiento positivo van a estar dispuestos a ayudarte, porque son positivos. Si vos estás con una persona virtuosa, con pensamiento positivo, seguro te va a dar una mano y pum arrancaste y seguís. Y después, seguramente, vos siendo positivo vas a dar una mano a aquel que no lo es.
En cambio, la persona de pensamiento negativo, muy difícil que te quiera dar una mano.
11.- Sal de tu zona de confort.
Hay gente que está acostumbrada a las cosas y sigue haciendo lo mismo. Basta, perdé el miedo. Salí. Hay muchos desafíos. Tengo miedo, ese es el tema. Estás cómodo, aunque estés sufriendo, está mal. Sí salís de tu zona de confort, te vas a sentir emponderado, vas a sentir que vos podés, que no es poca cosa.
Un ejemplo: Supongamos que el objetivo principal es hablar bien el inglés y tu mayor dificultad es tener vergüenza de hablar con las personas. Aunque no sea fácil, tenés que comenzar a tomar actitud y para perder ese miedo, empezá a estar con la gente y hablar inglés, aunque te equivoques.
Perder el miedo a equivocarse es muy importante para la automotivación y reirte de los errores.
12.- Arrancar bien el día.
Parece obvio, pero no lo es, no mucha gente arranca bien el día. Por ejemplo: Voy a prender el auto y no me arranca porque no tengo batería. No importa, reíte. Te quedaste sin combustible, reíte.
Me levanto a la mañana y digo qué tormenta y tengo que ir a trabajar. ¡Que frío que hace! Llueve, hace terrible frío, tomá un rico desayuno y decí: que linda tormenta, va a haber un poquito de agua y creo que me voy a mojar un poquitito; y salgo y me divierto y veo qué pasa. Todo eso te va a dar buena energía para tu salida; y salís con buena vibra.
13.- Mimarme.
Date algunos premios, chiquitos, lo que uno pueda. Esas son las pequeñas metas y los pequeños objetivos.
Claro, todo esto que estamos hablando es muy lindo, muy fuerte para levantar esa situación amotivacional que uno tiene. El síndrome motivacional te lleva a los peores lugares, no es depresión, pero puede llevarte a la depresión. Es ahí que es importante aplicar todo esto, porque uno ya aprendió a no estar motivado.
Y uno podría decir: todo lo que vos me decís, está bueno. Pero ¿cómo puedo motivarme si estoy en Argentina, que económicamente no está bien, no tengo la vacuna, tenemos un desborde sanitario, no se entiende por dónde vamos ni hacia dónde vamos? ¿Cómo me puedo animar?
Si, te podés animar, todo es un tema de visión. Y ahí es donde uno debe proyectarse en positivo. O sea, mirar las cosas desde otro lugar.
Lo importante es que más allá de lo que esté pasando alrededor, cuando yo esté bien conmigo, seguramente solucione los problemas, y todos esos factores que me pueden generar un tipo de desánimo van quedando atrás.
Uno también podría decir: tengo mucho miedo, me cuesta mucho en esta incertidumbre país arriesgarme a algo. Hay que comprender que la automotivación es una vibración, las cosas se van acomodando. Siempre hay soluciones, siempre hay salidas. Siempre que llovió, paró, esto funciona así. Si yo estoy vibrando bien, hago que el cosmos vibre bien.
Yo soy una vibración, por eso la automotivación es importante. Y como yo vibro, hago que vibre. Y ahí volvemos a todo lo que hablamos recién, si yo estoy vibrando mal, hago que lo que me rodea vibre mal.
Si hay un grupo de gente que vibra mal, yo voy a vibrar mal. Cuando uno rompe el círculo de lo negativo y empieza a trabajar la virtuosidad, todo aparece y en lo menos pensado aparece. Cuando uno corta algunos círculos, y dice, mirá estaba trabado y se solucionó. Decía que tenía un pensamiento mediocre. Si, se fue y fluyó todo.
A veces, uno no entiende cómo funcionan las cosas, hay que dejar fluir hasta que después viene el aprendizaje. Hay gente que te tira la mala. Rajá. Andate.
Si yo estoy automotivado es una frecuencia, aprendan a estar con gente de buena vibra. La gente de buena vibra, va a darles ese impulso necesario para que ustedes salten en lo que quieran emprender.
Claramente que una buena automotivación, arranca cuando uno tiene un verdadero trabajo espiritual. Porque a la vida la ve desde otro lugar, entonces fácilmente uno va a lograr llegar a esos objetivos que uno quiere y necesita. Si uno tiene un buen trabajo espiritual, todo lo demás viene por añadidura, por ahí pasan las cosas.
A veces ocurre, y ahí está la confusión y es donde uno tiene que estar alerta, en el universo cuando a uno le empieza a ir bien, cuando estás automotivado, te empezás a sentir bien; y empieza a irte bien en lo que es este plano y de golpe te confundís, y empezás a hacer cosas del plano material, sabiendo que arrancaste por plano espiritual para que pegues este salto. ¿Qué es lo que pasa? Es fácil, hay que esperar para ver cómo te pegas el palo. Porque siempre es al revés. Y eso es vibración. Y por ahí va el tema de automotivación.
Les quiero decir que se cuiden. Un buen trabajo espiritual, es aquel que tiene una buena visión. No hay que bajonear, pero sí estar en alerta con todas las cosas que van ocurriendo con respecto a la salud.
Taller: "Automotivación en tiempos de pandemia"
Sábado 15 de Mayo 2021
A cargo del Profesor Claudio M.