La gravedad, una de las cuatro fuerzas fundamentales de la naturaleza, parece tranquilizadoramente constante por todo el universo, según un estudio de 21 años de duración sobre un lejano púlsar. Esta investigación ayuda a responder a una antigua pregunta en cosmología: ¿es la fuerza de la gravedad igual en todas partes y en todas las épocas? La respuesta, por ahora, parece ser Sí.
Unos astrónomos, usando el radiotelescopio GBT que la NSF (Fundación Nacional estadounidense de Ciencia) tiene en Virginia Occidental, Estados Unidos, y que se gestiona a través del Observatorio Nacional estadounidense de Radioastronomía (NRAO), y valiéndose también de observaciones hechas desde el Observatorio de Arecibo en Puerto Rico, han analizado ciertos detalles del comportamiento de un púlsar conocido como PSR J1713+0747.
Los púlsares son los remanentes superdensos y de rotación muy veloz de estrellas masivas que estallaron como supernovas. Son detectados desde la Tierra por las emisiones de ondas de radio que emanan desde sus polos magnéticos y que barren el espacio a medida que el púlsar gira. Dado que son enormemente densos y masivos, si bien comparativamente pequeños (apenas de 20 a 25 kilómetros de diámetro), algunos púlsares son capaces de mantener una tasa de giro con una regularidad que rivaliza con la de los mejores relojes atómicos en la Tierra. Esto convierte a los púlsares en laboratorios cósmicos excepcionales para estudiar la naturaleza fundamental del espacio, el tiempo y la gravedad.
Este púlsar en particular se halla aproximadamente a 3.750 años-luz de la Tierra. Orbita alrededor de una compañera, una estrella enana blanca, y es uno de los púlsares más brillantes y estables que se conocen. El análisis que el equipo de Scott Ransom, del Observatorio Nacional estadounidense de Radioastronomía, ha realizado sobre la interacción gravitacional entre este púlsar y la estrella enana blanca compañera ofrece evidencias claras de que la fuerza de la gravedad permanece constante a través del espacio.
La constante gravitatoria es una constante fundamental de la física, así que es importante poder garantizar su papel corroborándolo mediante observaciones de objetos de diferentes lugares, épocas y condiciones gravitatorias. El hecho de que veamos la gravedad comportándose igual en nuestro sistema solar que en un sistema estelar lejano ayuda a confirmar que la constante gravitatoria es realmente universal, tal como razona Weiwei Zhu, del equipo de investigación.
Fuente NCYT