Observando el fiero paisaje de Caronte, luna de Plutón

 
La sonda New Horizons de la NASA ha enviado las mejores imágenes en color y de mayor resolución hasta la fecha de la mayor luna de Plutón, Caronte, y dichas fotografías muestran que el aspecto actual del satélite es el resultado de una historia sorprendentemente compleja y violenta.

Con la mitad del diámetro de Plutón, Caronte es, en todo el sistema solar, el mayor satélite con respecto a su planeta. En algunos aspectos, se puede considerar a Plutón y Caronte como un sistema binario de planetas enanos (miniplanetas) más que como un miniplaneta con su satélite.


Muchos científicos de la New Horizons esperaban que Caronte fuera un mundo monótono y repleto de cráteres; en cambio, están hallando un paisaje cubierto con montañas, cañones, terrenos generados por desprendimientos de tierras, superficies con fuertes variaciones de color, y muchos otros rasgos complejos, propios de una geología muy dinámica.

Las imágenes en alta resolución del hemisferio que Caronte mantiene orientado hacia Plutón, transmitidas por la New Horizons a la Tierra hace unos días, revelan detalles de un cinturón de fracturas y cañones justo al norte del ecuador de esa luna. Este gran sistema de cañones se prolonga durante más de 1.600 kilómetros (1.000 millas) a lo largo de toda la faz de Caronte y probablemente continúa en su otra cara. Cuatro veces más largo que el Gran Cañón del Colorado, y en algunos lugares el doble de profundo, sus fallas y cañones delatan una conmoción geológica titánica en el pasado de Caronte.

Parece que toda la corteza de Caronte haya sido partida, tal como señala John Spencer, del equipo de investigación y científico del Instituto de Investigación del Sudoeste, en Boulder, Colorado, Estados Unidos.

El equipo ha descubierto también que las planicies al sur del cañón de Caronte, informalmente llamadas Vulcan Planum, tienen menos cráteres grandes que las regiones hacia el norte, lo que indica claramente que son más jóvenes. La uniformidad de las planicies, así como sus surcos y ligeras crestas, son claros signos de una renovación de la superficie a gran escala.

Una explicación para esta superficie tan uniformemente lisa la tenemos en un tipo de actividad volcánica fría llamada criovulcanismo. El equipo está discutiendo la posibilidad de que, hace mucho tiempo, pudo haberse congelado un océano de agua interno. Y el cambio de volumen resultante podría haber llevado a que Caronte se abriera, permitiendo que lavas acuosas alcanzaran la superficie en ese momento.

La sonda New Horizons está actualmente a 5.000 millones de kilómetros (3.100 millones de millas) de la Tierra, con todos sus sistemas de a bordo disfrutando de buena salud y operando normalmente.

Fuente NCYT


 
Artículo Anterior Artículo Siguiente