Puede ser el origen de la misteriosa luz ultravioleta observada hace 30 años
Una nave de la NASA ha descubierto un muro de hidrógeno en la frontera del sistema solar. Es el origen de una misteriosa luz ultravioleta observada hace 30 años, pero también puede proceder de una fuente desconocida situada en la Vía Láctea.
Una nave de la NASA ha detectado una pared de hidrógeno en los límites del sistema solar, la región del espacio, denominada Heliopausa, que es el punto en el que el viento solar se une al medio interestelar o al viento estelar procedente de otras estrellas.
La nave que ha hecho este descubrimiento se llama New Horizons, lanzada en 2006 y dedicada hasta ahora a la exploración de Plutón y el cinturón de Kuiper, que orbita alrededor del Sol a una distancia de entre 30 y 55 ua. (La unidad astronómica (abreviada ua) es una unidad de longitud igual a 149 597 870 700 m.)
Los protagonistas de este descubrimiento explican en un artículo publicado en la revista Geophysical Research Letters que lo primero que observaron fue una fuente de luz ultravioleta en los límites del sistema solar de la se tenía conocimiento desde hace 30 años.
Consideran que esa luz ultravioleta es la consecuencia de la dispersión de la luz solar por los átomos de hidrógeno a lo largo del sistema solar, y que esos átomos son los que forman la pared de hidrógeno.
En el límite de la heliosfera
Añaden que la pared de hidrógeno señala el límite de la heliosfera, la región espacial que se encuentra bajo la influencia del viento solar y su campo magnético. Esta región se compone de iones procedentes de la atmósfera solar y se extiende más allá de la órbita de Plutón.
Estos iones originan una burbuja magnética que es donde se encuentran los diferentes planetas de nuestro sistema solar. Esta burbuja es la heliosfera
Más allá de esa burbuja, explican los autores de esta investigación, se abre un espacio que está unas 100 veces más lejos del Sol que la Tierra. En esta región, los átomos de hidrógeno no cargados disminuyen cuando chocan con los pequeños fragmentos del viento solar.
Concluyen que esas colisiones son las que forman la pared de hidrógeno observada por New Horizons y que esta pared es la que dispersa la luz ultravioleta que les llevó a conocer mejor la naturaleza de la última frontera del sistema solar.
Si la luz ultravioleta procede de la pared de hidrógeno, los autores de esta investigación suponen que podría estar formada por vientos interestelares que se encuentran con el viento solar. El equipo de New Horizons continuará investigando este descubrimiento para conocer mejor sus características y relevancia para el conocimiento del universo.
Una observación confirmada
La luz ultravioleta en los límites del sistema solar fue observada por misiones espaciales anteriores hace 30 años. Lo que ha aportado de nuevo New Horizons no sólo es una observación más precisa, sino también que procede de una pared de hidrógeno.
Los astrónomos lo saben porque hay más luz ultravioleta de la que debería. Sin el muro, esa luz ultravioleta no tiene otra explicación. Pero no descartan que pueda proceder de una fuente todavía desconocida.
Para despejar la incógnita habrá que esperar a que New Horizons siga su viaje. Si a medida que se aleja, el brillo ultravioleta desciende, lo más probable es que la luz ultravioleta proceda de una fuente todavía desconocida situada más allá del sistema solar.
New Horizons tiene como finalidad caracterizar la geología global y morfología de Plutón y sus satélites, el estudio de la composición superficial de dichos cuerpos y la caracterización de la atmósfera de Plutón. A principios de 2019 se propone observar el objeto transneptuniano 2014 MU69.
Una nave de la NASA ha descubierto un muro de hidrógeno en la frontera del sistema solar. Es el origen de una misteriosa luz ultravioleta observada hace 30 años, pero también puede proceder de una fuente desconocida situada en la Vía Láctea.
Una nave de la NASA ha detectado una pared de hidrógeno en los límites del sistema solar, la región del espacio, denominada Heliopausa, que es el punto en el que el viento solar se une al medio interestelar o al viento estelar procedente de otras estrellas.
La nave que ha hecho este descubrimiento se llama New Horizons, lanzada en 2006 y dedicada hasta ahora a la exploración de Plutón y el cinturón de Kuiper, que orbita alrededor del Sol a una distancia de entre 30 y 55 ua. (La unidad astronómica (abreviada ua) es una unidad de longitud igual a 149 597 870 700 m.)
Los protagonistas de este descubrimiento explican en un artículo publicado en la revista Geophysical Research Letters que lo primero que observaron fue una fuente de luz ultravioleta en los límites del sistema solar de la se tenía conocimiento desde hace 30 años.
Consideran que esa luz ultravioleta es la consecuencia de la dispersión de la luz solar por los átomos de hidrógeno a lo largo del sistema solar, y que esos átomos son los que forman la pared de hidrógeno.
En el límite de la heliosfera
Añaden que la pared de hidrógeno señala el límite de la heliosfera, la región espacial que se encuentra bajo la influencia del viento solar y su campo magnético. Esta región se compone de iones procedentes de la atmósfera solar y se extiende más allá de la órbita de Plutón.
Estos iones originan una burbuja magnética que es donde se encuentran los diferentes planetas de nuestro sistema solar. Esta burbuja es la heliosfera
Más allá de esa burbuja, explican los autores de esta investigación, se abre un espacio que está unas 100 veces más lejos del Sol que la Tierra. En esta región, los átomos de hidrógeno no cargados disminuyen cuando chocan con los pequeños fragmentos del viento solar.
Concluyen que esas colisiones son las que forman la pared de hidrógeno observada por New Horizons y que esta pared es la que dispersa la luz ultravioleta que les llevó a conocer mejor la naturaleza de la última frontera del sistema solar.
Si la luz ultravioleta procede de la pared de hidrógeno, los autores de esta investigación suponen que podría estar formada por vientos interestelares que se encuentran con el viento solar. El equipo de New Horizons continuará investigando este descubrimiento para conocer mejor sus características y relevancia para el conocimiento del universo.
Una observación confirmada
La luz ultravioleta en los límites del sistema solar fue observada por misiones espaciales anteriores hace 30 años. Lo que ha aportado de nuevo New Horizons no sólo es una observación más precisa, sino también que procede de una pared de hidrógeno.
Los astrónomos lo saben porque hay más luz ultravioleta de la que debería. Sin el muro, esa luz ultravioleta no tiene otra explicación. Pero no descartan que pueda proceder de una fuente todavía desconocida.
Para despejar la incógnita habrá que esperar a que New Horizons siga su viaje. Si a medida que se aleja, el brillo ultravioleta desciende, lo más probable es que la luz ultravioleta proceda de una fuente todavía desconocida situada más allá del sistema solar.
New Horizons tiene como finalidad caracterizar la geología global y morfología de Plutón y sus satélites, el estudio de la composición superficial de dichos cuerpos y la caracterización de la atmósfera de Plutón. A principios de 2019 se propone observar el objeto transneptuniano 2014 MU69.
Fuente TENDENCIAS 21