La respuesta neuronal es la misma en las personas que asisten a un concierto
La música cautiva a sus oyentes y sincroniza sus ondas cerebrales, lo que explica el entusiasmo colectivo que se produce durante un concierto. Los estilos musicales desconocidos mantienen el interés de la audiencia durante más tiempo, sobre todo si los individuos tienen formación musical.
Un estudio realizado por investigadores del City College de Nueva York (CCNY) y la Universidad de Arkansas, en Estados Unidos, ha medido las respuestas neuronales de una audiencia a la música para comprender mejor cómo esta es capaz de mantener conectados y entregados a los oyentes.
De acuerdo con los hallazgos, la entrega de un oyente a la música disminuye con la repetición cuando las piezas resultan familiares. Sin embargo, los estilos musicales desconocidos pueden mantener el interés de una audiencia durante más tiempo, sobre todo cuando los individuos tienen formación musical.
Estudio de las ondas cerebrales
Hasta ahora, ha sido difícil medir el compromiso de un sujeto con la música, debido a que la autoevaluación tiene ciertos límites. Para superarlos, Jens Madsen y Lucas Parra, de la Escuela de Ingeniería Grove del CCNY, midieron la sincronización de las ondas cerebrales de una audiencia.
"Lo genial de esto es que, al medir las ondas cerebrales de las personas, podemos estudiar cómo se siente la gente con respecto a la música y lo que la hace tan especial", explica Madsen en un comunicado.
Cuando un oyente se involucra con la música, sus respuestas neuronales están sincronizadas con las de otros oyentes, por lo que la correlación de las ondas cerebrales entre los sujetos es una medida más objetiva de su compromiso con las melodías.
Música instrumental
En este estudio, se expuso a los participantes a piezas instrumentales más conocidas, como esta Sinfonía nº 24 en si bemol de Wolfgang Amadeus Mozart.
Entre las piezas no tan familiares, los participantes escucharon, entre otros, un fragmento de la Sonata para piano de Igor Stravinsky. El resto de piezas se pueden escuchar aquí.
Lo novedoso despierta más interés
Según los resultados, en las exposiciones repetidas a música instrumental, la correlación entre los sujetos disminuyó cuando el estilo musical les resultaba más familiar. Esto implica que los individuos prestaban menos atención.
Los participantes con formación musical mostraron una mayor correlación entre sí, y la mantuvieron, durante su exposición a música de estilo desconocido. Esto distingue la música de otros ámbitos, en los que el interés disminuye con la repetición.
La música cautiva a sus oyentes y sincroniza sus ondas cerebrales, lo que explica el entusiasmo colectivo que se produce durante un concierto. Los estilos musicales desconocidos mantienen el interés de la audiencia durante más tiempo, sobre todo si los individuos tienen formación musical.
Un estudio realizado por investigadores del City College de Nueva York (CCNY) y la Universidad de Arkansas, en Estados Unidos, ha medido las respuestas neuronales de una audiencia a la música para comprender mejor cómo esta es capaz de mantener conectados y entregados a los oyentes.
De acuerdo con los hallazgos, la entrega de un oyente a la música disminuye con la repetición cuando las piezas resultan familiares. Sin embargo, los estilos musicales desconocidos pueden mantener el interés de una audiencia durante más tiempo, sobre todo cuando los individuos tienen formación musical.
Estudio de las ondas cerebrales
Hasta ahora, ha sido difícil medir el compromiso de un sujeto con la música, debido a que la autoevaluación tiene ciertos límites. Para superarlos, Jens Madsen y Lucas Parra, de la Escuela de Ingeniería Grove del CCNY, midieron la sincronización de las ondas cerebrales de una audiencia.
"Lo genial de esto es que, al medir las ondas cerebrales de las personas, podemos estudiar cómo se siente la gente con respecto a la música y lo que la hace tan especial", explica Madsen en un comunicado.
Cuando un oyente se involucra con la música, sus respuestas neuronales están sincronizadas con las de otros oyentes, por lo que la correlación de las ondas cerebrales entre los sujetos es una medida más objetiva de su compromiso con las melodías.
Música instrumental
En este estudio, se expuso a los participantes a piezas instrumentales más conocidas, como esta Sinfonía nº 24 en si bemol de Wolfgang Amadeus Mozart.
Entre las piezas no tan familiares, los participantes escucharon, entre otros, un fragmento de la Sonata para piano de Igor Stravinsky. El resto de piezas se pueden escuchar aquí.
Lo novedoso despierta más interés
Según los resultados, en las exposiciones repetidas a música instrumental, la correlación entre los sujetos disminuyó cuando el estilo musical les resultaba más familiar. Esto implica que los individuos prestaban menos atención.
Los participantes con formación musical mostraron una mayor correlación entre sí, y la mantuvieron, durante su exposición a música de estilo desconocido. Esto distingue la música de otros ámbitos, en los que el interés disminuye con la repetición.
Fuente TENDENCIAS 21