Si eres de los que no hace ejercicio puede que no sea totalmente tu culpa.
Es posible que la razón por la que te cueste tanto estar activo físicamente no pase por tu falta de voluntad, sino por el simple hecho de cómo eres.
O que las innumerables excusas que sueles mencionar para justificar una vida sedentaria en realidad tengan fundamento, o por lo menos algunas de ellas.
El punto es que no puede ser simplemente casualidad que pese al bombardeo de información sobre los numerosos beneficios que brinda el ejercicio, tanto para la salud como para el estado de ánimo, todavía haya una mayoría de la población que no hace ningún tipo de entrenamiento físico.
Es posible que la razón por la que te cueste tanto estar activo físicamente no pase por tu falta de voluntad, sino por el simple hecho de cómo eres.
O que las innumerables excusas que sueles mencionar para justificar una vida sedentaria en realidad tengan fundamento, o por lo menos algunas de ellas.
El punto es que no puede ser simplemente casualidad que pese al bombardeo de información sobre los numerosos beneficios que brinda el ejercicio, tanto para la salud como para el estado de ánimo, todavía haya una mayoría de la población que no hace ningún tipo de entrenamiento físico.