La misión Artemis I de la NASA volvió con éxito a la Tierra tras una travesía alrededor de la Luna de casi 26 días.
La cápsula Orion, que llevará astronautas al satélite en los próximos años, ha amerizado en un punto del océano Pacífico, cerca de la isla de Guadalupe de México.
Debido a que se trataba de una prueba, esta vez no había personas a bordo, pero eso cambiará para el próximo vuelo.
La NASA está planeando misiones cada vez más complejas con Orion.
Es probable que comiencen a fines de 2024 e incluyan, en 2025 o 2026, un intento de llevar de vuelta a los humanos a la superficie lunar.
Lo ocurrido este domingo se logró por última vez hace exactamente 50 años con la tripulación del Apolo 17.
El nuevo proyecto de la agencia se llama Artemisa, quien en la mitología griega era la hermana de Apolo.
La NASA había descrito el regreso de Orión a la Tierra como su objetivo "prioritario".
Idicios de que culminó con éxito
Los vehículos que regresan de distancias lunares lo hacen a una velocidad muy alta, unos 40 000km/h en el contacto inicial con la atmósfera.
Se requiere un escudo térmico robusto para evitar que la nave se desgarre a medida que empuja contra el aire y las temperaturas alcanzan cerca de 3000C.
La capa protectora en la parte inferior de Orion es un nuevo diseño de una nave anterior.
La NASA tenía que asegurarse de que fuera efectiva antes de arriesgar la vidade los astronautas en futuras misiones.
La espectacular vista de los 11 paracaídas de la cápsula desplegándose e inflándose en secuencia fue una clara indicación de que el escudo térmico había hecho su trabajo.
Pero los ingenieros no emitirán un juicio hasta que hayan inspeccionado la nave.
Tras la caída de la cápsula en el océano, no lejos de la isla Guadalupe de México, los equipos de recuperación se trasladaron para recopilar imágenes que se podrán incluir en el análisis posterior.
Apolo 17
Los humanos aterrizaron por última vez en la Luna el 11 de diciembre de 1972, a las 19:54 GMT.
La tripulación del Apolo 17 de Gene Cernan y Harrison Schmitt pasó poco más de tres días en la superficie antes de regresar a la Tierra.
Esta imagen, remasterizada por el procesador de imágenes Andy Saunders, muestra las huellas de botas que dejaron. En ausencia de la erosión que ocurre en la Tierra, estas marcas se verían exactamente igual hoy, medio siglo después.
Observando el reingreso también estaba el socio de la NASA en la misión: la Agencia Espacial Europea, quien proporcionó el módulo de servicio y propulsión que había empujado expertamente a Orión hacia, alrededor y de regreso de la Luna.
Europa continuará suministrando más módulos de servicio para futuras misiones de Orión como medio para asegurar asientos para sus propios astronautas junto con sus colegas estadounidenses.
El modelo de propulsión para la próxima misión de Artemis, la primera en llevar una tripulación, ya se entregó a la NASA.
Un tercer vehículo, el que se utilizará en Artemis III, la misión de aterrizaje lunar, se encuentra en una etapa avanzada de ensamblaje en Alemania.
Mucho todavía tiene que salir bien si se quiere mantener los plazos para un regreso humano a la Luna. La NASA aún no tiene un sistema de aterrizaje. Esto está siendo desarrollado por el empresario estadounidense Elon Musk.
La cápsula Orion, que llevará astronautas al satélite en los próximos años, ha amerizado en un punto del océano Pacífico, cerca de la isla de Guadalupe de México.
Debido a que se trataba de una prueba, esta vez no había personas a bordo, pero eso cambiará para el próximo vuelo.
La NASA está planeando misiones cada vez más complejas con Orion.
Es probable que comiencen a fines de 2024 e incluyan, en 2025 o 2026, un intento de llevar de vuelta a los humanos a la superficie lunar.
Lo ocurrido este domingo se logró por última vez hace exactamente 50 años con la tripulación del Apolo 17.
El nuevo proyecto de la agencia se llama Artemisa, quien en la mitología griega era la hermana de Apolo.
La NASA había descrito el regreso de Orión a la Tierra como su objetivo "prioritario".
Idicios de que culminó con éxito
Los vehículos que regresan de distancias lunares lo hacen a una velocidad muy alta, unos 40 000km/h en el contacto inicial con la atmósfera.
Se requiere un escudo térmico robusto para evitar que la nave se desgarre a medida que empuja contra el aire y las temperaturas alcanzan cerca de 3000C.
La capa protectora en la parte inferior de Orion es un nuevo diseño de una nave anterior.
La NASA tenía que asegurarse de que fuera efectiva antes de arriesgar la vidade los astronautas en futuras misiones.
La espectacular vista de los 11 paracaídas de la cápsula desplegándose e inflándose en secuencia fue una clara indicación de que el escudo térmico había hecho su trabajo.
Pero los ingenieros no emitirán un juicio hasta que hayan inspeccionado la nave.
Tras la caída de la cápsula en el océano, no lejos de la isla Guadalupe de México, los equipos de recuperación se trasladaron para recopilar imágenes que se podrán incluir en el análisis posterior.
Apolo 17
Los humanos aterrizaron por última vez en la Luna el 11 de diciembre de 1972, a las 19:54 GMT.
La tripulación del Apolo 17 de Gene Cernan y Harrison Schmitt pasó poco más de tres días en la superficie antes de regresar a la Tierra.
Esta imagen, remasterizada por el procesador de imágenes Andy Saunders, muestra las huellas de botas que dejaron. En ausencia de la erosión que ocurre en la Tierra, estas marcas se verían exactamente igual hoy, medio siglo después.
Observando el reingreso también estaba el socio de la NASA en la misión: la Agencia Espacial Europea, quien proporcionó el módulo de servicio y propulsión que había empujado expertamente a Orión hacia, alrededor y de regreso de la Luna.
Europa continuará suministrando más módulos de servicio para futuras misiones de Orión como medio para asegurar asientos para sus propios astronautas junto con sus colegas estadounidenses.
El modelo de propulsión para la próxima misión de Artemis, la primera en llevar una tripulación, ya se entregó a la NASA.
Un tercer vehículo, el que se utilizará en Artemis III, la misión de aterrizaje lunar, se encuentra en una etapa avanzada de ensamblaje en Alemania.
Mucho todavía tiene que salir bien si se quiere mantener los plazos para un regreso humano a la Luna. La NASA aún no tiene un sistema de aterrizaje. Esto está siendo desarrollado por el empresario estadounidense Elon Musk.
Fuente BBC MUNDO