Los científicos coinciden en que un antiguo planeta chocó contra la Tierra cuando esta se estaba formando. Muchos expertos suponían que cualquier resto que Theia hubiera dejado en la Tierra se había mezclado en la caldera ardiente del interior de nuestro planeta. Una nueva teoría sugiere que los restos del antiguo planeta permanecen parcialmente intactos, enterrados debajo de nuestros pies.
Fuente CNN